Dice abiertamente que es el “ministro millennians”, y expresa de forma reiterada que su reto es que los colombianos de más bajos recursos y sin vivienda la puedan alcanzar. Reconoce que hay retos como, por ejemplo, las vigencias futuras que dejaron atado buena parte del presupuesto de la entidad.

Malagón explica la forma en que se modificará el programa de la viviendas gratis, en especial cómo mejorar las condiciones sociales y de seguridad que tienen esas ciudadelas.

- ¿Qué sensación le dejan estos casi 45 días al frente de la cartera de vivienda?

Sentimientos encontrados entre preocupación y esperanza. La primera, porque hemos consolidado siete trimestres consecutivos de decrecimiento en el sector de edificación, que entre 2005 y 2015 fue líder de la economía colombiana, creciendo 2 puntos por encima del PIB y 1 punto por encima del sector minero-energético. Sin embargo, en el último registro del Dane se dio un decrecimiento del 7,1 y al sumar siete trimestres en caída se puede considerar que estamos en una recesión técnica.

Esto tiene profundas implicaciones sobre la disponibilidad de vivienda y es una de las grandes razones por las cuales la taza de empleo se ha mantenido cercana el 10 %. Pero a la vez sentimos esperanza, porque contamos con un plan bien estructurado que nos va a permitir que el sector de la construcción pase a terreno positivo el año entrante y vuelva a crecer por encima del 4,5 %. Esperamos que la vivienda sea el sector líder de la economía nacional una vez más.

- ¿Semillero de propietarios, el nuevo programa del Gobierno, va a reemplazar a ‘Mi Casa Ya’?

Este fue un programa muy exitoso y por eso vamos a continuar con él. ‘Semilleros de propietarios’ lejos de acabarlo, lo va a hacer más fuerte y continuaremos con los programas Bipa, porque han funcionado bien y lo bueno hay que mantenerlo. Sin embargo, ‘Mi Casa Ya’ tenía un desafío, que funciona bien para un grupo de personas que lograba conseguir su cuota inicial, pero hay un segmento todavía más vulnerable que tiene que elegir entre pagar un arriendo y ahorrar para la cuota inicial.

Conceptualmente esas familias nunca iban a poder ser beneficiadas con ‘Mi Casa Ya’, porque no iban a poder hacer el ahorro y, ahora, lo que queremos hacer con el nuevo programa es llevar de la mano a estas familias para que puedan ser beneficiarias de ‘Mi Casa Ya’.

La idea nació del presidente Iván Duque en la campaña, él revisó todas las experiencias internacionales y trazamos los fundamentos de lo que sería este programa. Una vez ya en el ejercicio del Gobierno, activamos mesas técnicas con toda la industria, con los constructores, banqueros, las lonjas, le fuimos dando forma, perfeccionamos esa idea y así es como nace ‘Semillero de Propietarios’.

- ¿A cuántas personas esperan llegar y qué hay que hacer para acceder a él?

Nosotros queremos llegarle a 200 mil familias, que por su perfil de ingreso suelen tener en su composición demográfica más de tres habitantes por hogar, esto quiere decir que con el programa vamos a beneficiar entre 800 mil y dos millones colombianos. La forma en que las vamos a elegir es focalizando muy bien estos recursos, que son escasos, pero esos criterios de focalización y convocatoria los estaremos lanzando en las próximas semanas.

Hay unos mandamientos que hoy podemos enunciar. No serán beneficiarios de este programa aquellos que no reciban ingresos superiores a los dos salarios mínimos para priorizar el segmento más vulnerable de la población; tampoco aquellos que ya tengan una vivienda. Este no es un programa para adquirir una segunda vivienda, es para cerrar el déficit cualitativo de los más necesitados.

- Esas familias van a estar en sectores muy vulnerables, ¿cómo lograr que sean ellos los que realmente puedan tener esa cuota y que no se queden colgados?

Hoy en día esas familias están pagando un porcentaje muy alto de sus ingresos en arriendo, lo cierto es que hoy tienen un techo que están en condiciones subóptimas la mayoría de veces, pero hoy tienen una solución imperfecta de arriendo que además es costosa.

Nosotros queremos subsidiar el arriendo con 350 mil pesos por familia, con lo cual se pueden mudar a una vivienda normal, cuyo contrato tiene todos los seguros y estará soportado por la Nación. Ellos tendrán que aportar el dinero que haga falta para pagar el arriendo, pero al liberarles el ingreso disponible, las familias adquieren un compromiso con nosotros.

- ¿Cuál es ese compromiso?

Que esa plata que les está quedando libre no se la van a gastar, sino que la van ahorrar para construir su cuota inicial y a la vuelta de 24 meses van a contar con cerca de 5 millones de pesos ahorrados y en ese momento van a ser elegibles para ‘Mi Casa Ya’. Además, van a llevar dos años bancarizadas mostrando que tienen capacidad de ahorro y recurrencia en ingresos. Hay una tercera que es la piedra angular del diseño del programa y es la garantía que la cuota que van a tener que pagar por su casa propia es menor o igual a lo que hoy pagan por un arriendo informal.

- ¿Cuánto le costará esto al Gobierno y de dónde saldrá la plata para financiarlo?

Este programa vale 1,6 billones de pesos, pero dado que se ejecuta durante los cuatro años, toca ir al debate presupuestal año tras año a buscar los recursos. Tenemos la certeza de que el otro año podemos empezar con los primeros 40 mil y además quedará en el Plan Nacional de Desarrollo y así garantizar que llegamos a la meta total.

- ¿En qué se fundamenta el programa de mejoramientos de vivienda?

Este programa ataca ya no el problema del número de viviendas sino el déficit cualitativo, donde las familias viven hacinadas, no cuentan con baterías sanitarias, tienen carencia de espacios sépticos en donde manipular alimentos o no tienen piso, y eso hace que una familia esté en déficit cualitativo. Cerca de 1,1 millones de familias en Colombia viven en esa condición y no se tenía clara una política para ellos. El presidente dijo en campaña que se van a hacer 600 mil mejoramientos. Queremos en 2022 entregar una Colombia con este déficit cualitativo a la mitad. Antes de cumplirse los cien días de Gobierno se estará lanzando este programa.

- ¿Estos programas tienen el apoyo de los constructores, de los inversionistas y diferentes actores del sector?

Se han convertido en los mejores aliados. Hemos trabajado de la mano, incluso superando diferencias con los constructores, las lonjas y los banqueros, y estamos montados todos en el mismo bus. ‘Semillero de propietarios’ es la gran esperanza para dinamizar el mercado de la construcción, además que se bancarizará a 200 mil familias, como también se mejorará la cartera hipotecaria y se dinamizará la vivienda de interés prioritario.

- ¿Qué se tiene proyectado para la vivienda rural?

Hoy en día esa responsabilidad está en cabeza del Ministerio de Agricultura, pero una gran innovación institucional es que por primera vez ambos sacaremos políticas de manera conjunta. Lo vamos a ver en el programa ‘Casa digna, vida digna’, donde los 600 mil mejoramientos van a ir 200 mil a la vivienda rural con estándares de calidad iguales y con una misma política, en un mismo documento Conpes.

- ¿Qué va a hacer con el ‘chicharrón’ de las viviendas gratis’?

Vamos a enfrentarlo inteligentemente. Primero cumpliremos con los compromisos contractuales del pago de las vigencias futuras de los próximos tres años, en un orden de los tres billones de pesos que ya fueron comprometidos con las casas que se entregaron. Lo segundo es que vemos oportunidades para revitalizar esas viviendas gratuitas. En algunos sitios el programa no ha sido tan exitoso, porque no tenemos infraestructura complementaria en centros educativos ni en centros de desarrollo infantil, ni en parques, ni en andenes, que permitan trasladar mayor bienestar a los que son beneficiarios.

Haremos el esfuerzo porque esos proyectos vengan acompañados siempre de infraestructura complementaria, también haremos la infraestructura social. Algunos proyectos han tenido acompañamiento en materia de convivencia y han salido bien, pero en otros hay fronteras invisibles, existen riñas, hay tensión social. Esto no significa que el proyecto esté destinado a fracasar, con una intervención que atienda esas problemáticas, con un acompañamiento sociológico, esos espacios se pueden mejorar. El Gobierno va a revitalizar las casas gratis.

- ¿Quedó muy atado el Ministerio de Vivienda a las vigencias futuras?

Una parte importante del presupuesto de inversión del Ministerio de Vivienda está destinado al pago de las vigencias futuras anteriormente previstos, eso es una realidad y debemos hacer el trámite presupuestal de los nuevos programas y de aquellos que consideramos son muy buenos como son ‘Mi Casa ya’.