El año de los SSD

El reemplazo casi perfecto para los discos duros está en el mercado hace años y no ha sido adoptado en masa por los fabricantes, ni aún por los consumidores más exigentes. Sin embargo, un aumento en la cantidad de información que los SSD pueden guardar, y otro factor aún más importante, podrían lograr que los dispositivos lleguen a manos de todos.

Olvídese de comprar computadores con más núcleos en su procesador, o de con más Gigabytes de memoria RAM; lo más probable es que la unidad más lenta en el equipo que está usando en este momento sea su disco duro.

Por fortuna, la tecnología con que los computadores almacenan la información ha cambiado radicalmente por primera vez desde hace décadas. Y en 2013 esa nueva tecnología podría llegar al fin a los consumidores.

    
¿Por qué son importantes?
Aunque parezca increíble, el disco duro de su computador funciona de forma similar a como lo hacían los discos de vinilo que dominaron el mercado musical hasta la década de los 70.

En estos dispositivos una serie de agujas a una distancia muy pequeña de la superficie de varios discos lee la información que hay en ellos. Las agujas necesitan moverse para alcanzar todos los sectores de los discos, lo que incrementa el tiempo que toman los datos en ser leídos.


Esta demora es la que hace que transcurran unos segundos desde que usted presiona un ícono hasta que finalmente se abre un programa. También es la que hace que su computador tome hasta un minuto entre el encendido y el momento en que puede presionar ese ícono.


Pero una nueva clase de dispositivos llegó al mercado hace un par de años. Se llaman discos de estado sólido, o SSD por su sigla en inglés, y son los primeros dispositivos en la historia que no confían en un sistema magnético para guardar información. Como no tienen partes móviles, los SSD entregan la información al computador mucho más rápido. Usando uno de ellos, el tiempo que toma el arranque del sistema o abrir un programa se reduce drásticamente.

Precio en picada

Si son el reemplazo de la parte más lenta de un computador moderno, ¿por qué los fabricantes no han empezado a vender equipos con SSD en lugar de discos duros? La respuesta principal es: por su precio.


A inicios de 2011 el precio promedio por cada Gigabyte en un disco duro era de 10 centavos de dólar; un disco de 500 Gigabytes costaba 50 dólares. Al mismo tiempo, un SSD de sólo 60 Gigabytes costaba un poco más de 120 dólares. Con un poco más de optimismo que de tino, los analistas predijeron que, durante 2012, el precio de los SSD llegaría a bajar de manera drástica.


Por fortuna 2013 parece ser el año en que se cumpla la profecía. Actualmente un SSD de 250 Gigabyes cuesta 150 dólares, y durante los próximos meses es probable que unidades de 500 Gigabytes estén disponibles a precios igualmente atractivos, aunque todavía no comparables con los de los discos duros.


Esta semana la compañía Micron Technology anunció que el primer SSD del mercado con 960 Gigabytes de memoria está disponible. El precio es elevado: 600 dólares, pero aún ese es un valor de 65 centavos por Gigabyte, no tan distante del precio de los discos duros actuales.


Pérdida con elegancia
Por supuesto: los fabricantes de SSD han tenido que superar otros problemas aparte de su costo. Los discos duros son unidades muy confiables, con periodos de vida útil de varios años aún si se usan de forma constante.

Durante sus primeros años, los fabricantes SSD enfrentaron un problema grave: para aumentar la cantidad de información que los dispositivos pueden almacenar, debieron utilizar una tecnología que se gasta con el uso.


Este sacrificio no tiene un gran impacto para los usuarios convencionales, y, desde entonces, varios métodos han sido desarrollados para asegurarse de que la vida útil de los dispositivos sea comparable con la de un disco duro actual. Uno de ellos es equipar los discos con más memoria de la que es anunciada comercialmente. Esta memoria ‘invisible’ empieza a ser utilizada por el disco de forma automática cuando el mismo detecta sectores ‘muertos’ o demasiado usados y en peligro de fallar.


Sin embargo, esta desventaja hace que los SSD aún no sean una opción para centros de datos y servidores empresariales, donde seguirán comprándose grandes cantidades de discos convencionales, reduciendo la inversión total en SSD y la velocidad con que bajarán de precio.


Como atenuante en caso de calamidad, ciertos SSD tienen una característica atractiva: aún si se dañan y no pueden ser usados como unidades principales, algunos modelos permiten leer los datos que contiene, para rescatar información importante.


Adobe CS2 ahora es gratis
El pasado miércoles, la suite de herramientas gráficas CS2 de Adobe pudo ser descargada de forma gratuita, con el único prerrequisito de llenar un registro en el portal de la empresa. Durante los días siguientes la compañía incluso removió esa obligación, cambiando el portal por uno de descargas directas, que puede ser hallada en el sitio adobe.com/downloads/cs2_downloads.

La movida parecía inteligente a pesar de ser contraria a la política de la empresa hasta el momento. Por un lado, ninguna empresa va a reemplazar las herramientas actuales de Adobe, publicadas el año pasado, por los productos del paquete Creative Suite 2, lanzados en 2005. Pero miles de estudiantes y creadores de contenido independientes podrían aprovechar las herramientas gratuitas, en lugar de adquirir ilegalmente la última versión. Estos creadores y estudiantes aprenderían a usar estas herramientas, posiblemente, entrarían a trabajar en empresas donde pedirían comprar las nuevas versiones de la suite de Adobe.


De hecho, se cree que parte del éxito que Flash tuvo se debe a que la empresa que lo desarrolló, Macromedia, no invirtió demasiado tiempo tratando de evitar que Flash fuera pirateado. Así, miles de creadores pudieron publicar en Internet animaciones ricas en contenido y videos que convir­tieron al reproductor Flash Player en un requerimiento básico para cual­quier internauta.


El software de creación Flash y el reproductor Flash Player fueron, poste­riormente, comprados por Adobe.

Infortunadamente, durante la semana Adobe ha limitado el acceso al portal de descarga de CS2, permitiendo que algunos usuarios ingresen, pero redirigiendo a otros al portal de compra de CS6.

Credito
JUAN MARTÍNEZ MARTÍNEZ

Comentarios