“No sabemos si ella fue llevada hasta una calle del barrio Suerte 40 o la interceptaron cuando caminaba por dicho sector, lo cierto que muchas personas se acercaron cuando alertaron de que la joven yacía sobre una de las vías, gravemente herida. Luego, como vieron que aún respiraba, no dudaron en llevarla al hospital”, relataron líderes sociales de Miranda.

Ante la gravedad de sus heridas, los médicos ordenaron remitir de urgencia a la joven hacia la clínica Valle del Lili de Cali, pero falleció mientras era trasladada en un vehículo medicalizado.

La noticia, entonces, causó tristeza entre la población, porque la víctima era la hija de Julio Hernández, conocido cariñosamente como 'Pichila', quien es un reconocido comerciante de gas propano de este municipio. La mujer era madre de varios pequeños.

En el mes de abril, fueron asesinadas otras dos amas de casa también en el casco urbano de esta población, sin que hasta el momento se tenga resultados de las investigaciones que adelantan las autoridades.

Durante el mes, de acuerdo con la Corporación de Mujeres Ecofeministas, Comunitaria, Comunitar, fueron en total once ciudadanas asesinadas en diferentes partes del departamento. La cifra, en lo que va corrido del 2022, ya supera los 75 casos.

Por eso el temor es la constante cuando se registra en estos casos, más cuando Miranda es ahora el escenario de una violenta pugna entre grupos armados al margen de ley, narcotraficantes y fuerza pública.

“No sabemos qué está pasando, las autoridades solo se limitan a informar de estos hechos, incluso lo hacen en medio del temor, porque ahora sí es más complejo salir a dar declaraciones ya que es un hecho la presencia de las organizaciones ilegales acá en el Pueblo y eso causa es terror entre la gente”, agregaron líderes sociales.