Ruta Bogotá – Armenia

Hemos leído recientemente, en este diario, noticias relacionadas con la vía de Bogotá a Armenia. Cuando está terminando el primer tercio del año, tenemos que concluir que en el Ministerio de Transporte, o en Invías, o en ANI, o donde sea, hay algunos Pinochos o varios ingenuos que dan noticias a los ciudadanos ilusos.

Hemos leído recientemente, en este diario, noticias relacionadas con la vía de Bogotá a Armenia. Cuando está terminando el primer tercio del año, tenemos que concluir que en el Ministerio de Transporte, o en Invías, o en ANI, o donde sea, hay algunos Pinochos o varios ingenuos que dan noticias a los ciudadanos ilusos. Comencemos:

En la concesión de Bogotá a Girardot, que ha sido ejemplo de todo lo que no se debe hacer en una concesión, los voceros de Mintransporte y su agencia correspondiente se han desgañitado afirmando que, ahora sí, se va a completar la obra y, empezando la segunda mitad de 2012 afirmaron que para la mitad de 2013 estaría totalmente concluida la dable calzada en todos sus detalles. Faltan dos meses y lo que se ve es que esa promesa, como otras, tampoco se cumplirá.

Invías tiene el monumento a la improvidencia en el Viaducto del Tigre, (o De la Niña María como primorosamente lo bautizó el ministro que lo inauguró en el gobierno anterior). Hasta hoy, van “invertidos” más de veinte millardos de pesos (sí, veinte mil millones) y, al finalizar el año pasado, prometieron que para mitad de 2013 estarían terminadas las obras que por seis millardos más habría que hacer de manera adicional. Ahora, terminando abril, nos cuentan que están publicados los prepliegos de la licitación. ¡Se gastaron cuatro meses en llegar a esta etapa, cuando el año pasado ya conocían el valor de la obra! Si nos va bien, en junio o julio del 2014, finalizando el gobierno, veremos a la ministra o al presidente inaugurando (otra vez y luego de un período presidencial) al Viaducto del Tigre en el estado que esté, aunque no funcione, y lo renombrarán, entonces, el Viaducto de Todos los Santos.

Entre Cajamarca y el Túnel de La Línea están adecuando la doble calzada. Acaban de informar que estas obras estarán concluidas en este año, lo mismo que las que corresponden del lado del Quindío entre el túnel y Calarcá. En otro país, uno tomaría eso como un hecho cierto. La obra se puede terminar en ese plazo. Pero ¿habrá alguien en Colombia que les crea? O el funcionario que lo dijo es ingenuo o le apodan Pinocho. También dijo que el túnel en construcción estará en uso en 2014. Que Alá lo lleve de su mano y la promesa se cumpla.

Necesitamos un Mintransporte que comunique sus cosas con precisión de ingenieros y no de boquiflojos que solo quieren causar impacto mediático. Bien haría la ministra en exigir que los anuncios sean ciertos y certeros. Para que los ciudadanos sepamos a qué atenernos.

Otra cosa. Menos mal que hubo una persona que llevó unos escombros y llenó lo enormes cráteres, que no huecos, que hay en la Avenida del Ferrocarril, entre el Sena y el monumento de Prometeo. Porque si esperamos a la Secretaría de Infraestructura, nos coge el Folclor con los huecos ahí.

Credito
JULIO A. LONDOÑO B.

Comentarios