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Este avance fue posible gracias al respaldo decidido que diversos sectores nos brindaron a quienes lideramos la iniciativa: el papel del Partido Conservador, de líderes de otros partidos, como Germán Vargas, y de los medios de comunicación fue determinante y lo agradecemos mucho.
Sin duda, el presidente Iván Duque y el ministro de Salud, Fernando Ruiz, quienes han liderado adecuadamente esta titánica lucha contra el Covid, han escuchado el clamor de los interesados y han sido receptivos con la propuesta, especialmente con la que radiqué en el Congreso la semana anterior, por medio de la cual se crea la política pública para que las personas jurídicas y naturales, importen y comercialicen las vacunas contra el coronavirus, como coadyuvante del Plan Nacional de Vacunación (PNV), siguiendo la metodología y los procedimientos del Ministerio de Salud y el Gobierno nacional.
Para ello, se conformaron dos mesas técnicas que entrarán a definir en el menor tiempo posible el modelo de participación y establecer la capacidad de ampliación en la aplicación de las dosis.
Se estima que en dos semanas se dé vida a la resolución que reglamente el modelo de integración de los privados en el PNV y establezca los parámetros en las negociaciones con los fabricantes o proveedores, con el respectivo acompañamiento del Invima.
Es importante consolidar parámetros de protección al trabajador y su núcleo familiar, con especial énfasis si hay presencia de adultos mayores. Además, se debe contar con la aprobación de las autoridades sanitarias en las adquisiciones aprobadas, garantizar la cadena de frío, habilitar los prestadores, contar con una red verificable y subsanar los vericuetos jurídicos y pólizas, entre otros.
Todo lo anterior con el firme propósito de avanzar en la inmunidad de rebaño, garantizando que el 70 por ciento de la población esté vacunada antes de finalizar 2021. Así lograremos que los sectores de transporte, industria, infraestructura, comercial y de servicios retomen sus actividades de manera definitiva, a partir del segundo semestre de este año.
Estamos frente a un requerimiento legítimo y prioritario que busca masificar y dar velocidad a la vacunación de una manera responsable y ante todo equitativa para volver a la normalidad y retornar a los procesos de competitividad y productividad. El sector empresarial y el público deben recuperar sus niveles de inversión, pues de ello depende buena parte de la reactivación económica.
Tenemos una enorme posibilidad de avanzar unidos en un escenario complejo, lejos de las diferencias hay que reconocer que el sector privado representa y puede darle el impulso y la celeridad que el proceso de vacunación exige.
Esta batalla contra el coronavirus no se va a ganar sin el concurso y la buena voluntad de todo el aparato público y empresarial. Así que adelante y bienvenidos los privados a la vacunación en Colombia. Trabajemos en un solo propósito que es conservar la vida de las familias, garantizando su desarrollo y bienestar: ¡Nuestro Tolima y todo el país se merecen que cuidemos a su gente y a su economía con una rápida vacunación!
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