Esta semana el ministro de Hacienda, Dr. Mauricio Cárdenas, dio a conocer la intención que tiene el Gobierno nacional de radicar en las próximas sesiones del Congreso, un proyecto de ley que buscaría eliminar los tres ceros al peso colombiano.
El Ministro argumenta las bondades de la iniciativa diciendo que: “La idea de eliminarle tres ceros a la moneda colombiana es muy buena, nos va a facilitar la vida, va a hacer más sencilla la contabilidad de las empresas (...) y ahora que tenemos más turistas extranjeros pues va a facilitar también el cambio de monedas”. También dijo: “Que bueno contar con sectores amplios de la población y que esto también sirva para poder identificar esos dineros mal habidos, que están encaletados y que tendrán que salir. Además, Cárdenas añadió que hacer ese cambio no supondrá “grandes costos”
Ahí me pregunto, ¿que serán grandes costos para el Ministro?. Según el Dr. Juan José Echavarría el costo del proyecto que quitaría los ceros del peso colombiano sería de $400.000 millones. Ahora, en cuanto a la identificación del dinero producto del narcotráfico, ¿acaso ese dinero ilícito no está en dólares o en euros en su gran mayoría?. ¿No creerá el Sr. Fiscal General de la Nación, quien avala la propuesta, que es más fácil que el Estado ejerza su soberanía y ataque frontalmente a los cárteles de la droga para que no aumente, como ha venido sucediendo, el cultivo, procesamiento y el tráfico de estupefacientes?
Sin duda, la eliminación de los ceros facilitaría la contabilidad de las empresas, pero ese no es un problema que nos agobie notablemente o ¿sí?. Tampoco creo que los turistas que nos visitan pasen ratos amargos a la hora de hacer el cambio de su moneda a nuestro devaluado peso.
Es imposible abstenerse de cuestionar esta clase de “iniciativas” que no producen una solución real a los problemas que tenemos y que son un simple embeleco del Ministro y del gobierno Santos para gastar miles de millones en algo que para mí, no tiene trascendencia alguna y que, salvo la opinión de los economistas quienes son los expertos y la voz autorizada en estos temas, no trae un efecto que produzca una inflexión positiva en la economía colombiana.
Lo que sí debería hacer el Ministro, en lo poco que queda de gobierno y que resulta verdaderamente importante, es que trabaje en la elaboración de políticas públicas en donde se fortalezca el valor de nuestra moneda para que no pierda su capacidad adquisitiva, no permita Sr. Ministro, que los colombianos lo recordemos por aplicarnos reformas tributarias asfixiantes y por hacernos incurrir en gastos innecesarios.
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