opiniones distintas por parte de diversos sectores de opinión y no pocas de ellas interesadas y hasta perversas, la nuestra va dirigida, a generar inquietud frente a Derechos conocidos en la doctrina, particularmente referida a la persona, y dentro de ella a las libertades de Morales, las cuales resultan ser de muy difícil perceptibilidad, pues se basan, tal como nos lo recuerda Carbonnier, "en una estimación moral de aquél"; así las cosas, la libertad de la esfera de intimidad, trata de proteger a cada persona de toda intrusión por parte de terceros, este derecho se convierte al mismo tiempo en una verdadera libertad.

La Doctora Viviane, escogió, en otro pasaje cronológico de su vida un compañero, en términos más colombianos inserto una expresión que refiero con frecuencia: Uno es con quien quiere y no con quien le toca.

Por haber sido de manera constante, -tal vez no ambiciosamente perseguida- una expresión inteligente e interesante de la mujer culta en Colombia comprometida con valores democráticos, más por connotación de farándula periodística que otra cosa, se había conocido de la terminación de la mencionada relación; no obstante con absoluta integridad por el compromiso de representar una de las tres primeras figuras individuales del poder en Colombia, hizo público su matrimonio con la misma persona.

De la conducta anterior, actual o posterior de quien es, jurídicamente su cónyuge, es responsable sin extensión marital o familiar, el individuo mismo; Además ella sin tener porque hacerlo no ocultó su nuevo status civil.

Respecto a la responsabilidad judicial del hoy cónyuge de la Fiscal, insisto, es él y solo a él, a quien por edad, capacidad, y subjetividad corresponde responder de manera exclusiva, para lo cual la Fiscal, debería solicitar la designación de un Fiscal General Ad-hoc en todos los asuntos que pudieren llegar a comprometer la responsabilidad penal del mismo.

Lo que no puede tolerar el país, es exponer de manera grave el avance significativo de importantes investigaciones, en otro vergonzoso pero ya no sorprendente, episodio que vincula a intocables personajes, muy posibles abusadores de poder y erario, acerca de hechos sobre las cuales la Nación se encuentra sedienta de verdad y de responsables, quienes quisieran derrumbar la figura del Fiscal, para seguir anidados en la impunidad.