Pese a que el Gobierno Santos se jactaba de haber conectado en banda ancha a todo el territorio nacional, según cifras recientes del Ministerio de las TIC, solamente un 61% de los colombianos cuenta con servicio de internet, lo cual representa que aproximadamente 20 millones de personas no tienen acceso al ciberespacio.
Con base en esa realidad, el nuevo Gobierno ha querido implementar reformas a la ley de las tecnologías de la información y las comunicaciones, y de paso, abrirle camino a un nuevo ministerio, que se complementaría con las actividades de las TIC: el Ministerio de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación, intención que han aplaudido los investigadores y docentes de las universidades del país.
En ese propósito, hay varios elementos que tendrían cabida en la nueva Ley que ya pasó el primer debate en el Congreso, y que pretende crear un regulador convergente encargado de la televisión, la radio, las telecomunicaciones y el Internet, trabajo que actualmente recae en la Comisión de Regulación de Comunicaciones y la Autoridad Nacional de Televisión. Con la nueva ley se unificaría. Adicional a ello, se pretende ampliar los periodos del uso del espectro con el fin de permitir el ingreso de nuevas concesiones y mejorar la oferta.
Según lo expuesto por el Gobierno, el proyecto de ley 152 sería una gran apuesta, y así pareciera a simple vista. Como es normal, otras voces han surgido para hacer algunos reparos y alertar sobre las consecuencias de mutar a otros escenarios. La más importante y que tiene mucho sentido es la que tiene que ver con que con la modificación que se pretende hacer, se ha dicho que habría un centralismo en lo relacionado con los medios de comunicación, que deberían ser aún mucho más independientes, y los mismos dependerían en buena medida del gobierno de turno a través del MinTIC.
Ejemplo de ello, y que justamente por estos días causó gran polémica, fue la amenaza de cancelación del programa ‘Los Puros Criollos’, transmitido por Señal Colombia, según denunciara su presentador Santiago Rivas, por un aparente veto en represalia a críticas hechas al Gobierno. Con la nueva ley podría haber mayor control a los contenidos, pero además de ello, también algunas voces señalaron que con la reforma a hacer los privados tendrían prioridad y se verían favorecidos, como es el caso de Carlos Slim, denunciado recientemente por el periodista Daniel Coronell.
Por ahora, y aunque la intención del Gobierno es que se apruebe rápidamente, faltan dos debates más, en donde deben salir a jugar otro tipo de elementos, como aquellos en donde se ha dicho que la señal del fútbol profesional colombiano ahora será denominada Premium y dejará de ser abierta. Todo pareciera indicar que la reforma es un hecho, así personajes como los senadores Petro y Mockus, también hayan dicho que le falta debate técnico y mayor argumentación.
Internet y las redes sociales deberán seguir siendo la infraestructura de los alternativos e independientes y aquello tampoco está del todo claro con la intención del Gobierno. ¿Habrá censura?
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