Una nueva controversia política está a la orden del día por cuenta de una iniciativa del partido Centro Democrático que radicó un proyecto de Acto Legislativo con el que busca que, a través de referendo, la ciudadanía pueda tumbar sentencias de la Corte Constitucional.
Sectores opositores al Partido de Gobierno e incluso el máximo jefe de esa colectividad, el senador Álvaro Uribe Vélez, ya se mostraron contrarios a la propuesta, al considerar que se trata de controvertir fallos del máximo Tribunal encargado de salvaguardar la Constitución Nacional.
En el documento, que tiene fecha de radicación del 18 de septiembre, se lee: “Parágrafo: Cuando la Corte Constitucional mediante un fallo interprete materias referidas a los derechos reconocido en el Capítulo 1 del Título II y a sus garantías, a los procedimientos de participación popular, o al Congreso, la ciudadanía podrá solicitar mediante un referendo que se anule dicha interpretación, si la considera contraria a sus principios fundamentales. Y se entenderá derogada por el voto negativo de la mayoría de los sufragantes, siempre que en la votación hubiere participado al menos la cuarta parte del censo electoral y cumplan las exigencias del artículo 155 de la Constitución política”.
Los más críticos del uribismo inmediatamente enfilaron sus baterías de guerra afirmando que se quiere revivir por esta vía la reelección del expresidente Uribe. En febrero de 2010, la Corte Constitucional sepultó el referendo que buscaba habilitar a Álvaro Uribe Vélez para un tercer mandato presidencial. Por supuesto, esa decisión fue nefasta para sus seguidores.
Pero otras decisiones del Alto Tribunal cayeron como patada en el estómago a la dirigencia de este partido. El pasado mes de junio, la Corte tumbó apartes de los artículos del Código de Policía que prohibían el consumo de sustancias psicoactivas y de alcohol en espacios públicos. Los magistrados concluyeron que la medida violaba el libre desarrollo de la personalidad.
También el Tribunal, mediante sentencia de 2015, las parejas del mismo sexo obtuvieron el derecho de aplicar a procesos de adopción. En todo lo anterior, el uribismo se ha mostrado en abierto desacuerdo.
Imagínense que cualquier decisión que no guste a una tendencia política deba ser revalidada a través de referendo por un pueblo manipulado y engañado como sucedió con el referendo por los Acuerdos de Paz. Todo se supo, hasta la estrategia del miedo montada para que ganara el No.
El representante Álvaro Hernán Prada, autor del proyecto de acto legislativo que pretende revalidar las sentencias de la Corte vía referendo, no actúa solo. Esos proyectos de alto vuelo en el Congreso siempre cuentan con el beneplácito del jefe máximo. Eso todos lo saben.
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