Repensar y actualizar los documentos de la Visión de Ibagué y El Tolima es una apuesta que deben concretar el sector privado, los gremios y las administraciones actuales. Pero más allá de sobre diagnósticos exagerados, de documentos abultados y con metodologías rebuscadas, lo que se necesita es actuar. Actuar sin excusas, actuar sin parroquialismos sectarios y actuar con la visión gerencial.
Las administraciones de turno, la de Ricardo Orozco en el departamento y la de Fabián Hurtado en el municipio, acaban de mostrar las cartas. Ya pusieron el naipe sobre la mesa con la aprobación de los planes de desarrollo.
Ahora, estamos esperando las ideas, las apuestas y el liderazgo de los gremios, de los empresarios, de aquellas actividades que han logrado mantenerse “ilesas”, tras el paso arrollador de la pandemia.
Hasta hoy, los gremios, la Cámara, las asociaciones no han presentado propuestas de reactivación económica que permitan la generación de riqueza y de nuevos puestos trabajo. Históricamente, se han acostumbrado mucho a los “manidos” convenios Interadministrativos con la plata del Estado; pero de liderar muy poco y ya es hora.
Sobre la obras públicas que pretenden ejecutar las administraciones no puede caer el peso de la generación de empleo. Es un aporte importante, pero no definitivo. Allí también será clave la celeridad en los procesos contractuales. Ahora, debe venir la reactivación paulatina en lo que queda del año de otros sectores; eso sí con protocolos, porque si se dispara el contagio y se llenan los hospitales no quedará otra salida que más confinamiento.
Con el regreso a la vida productiva de nuevos sectores seguramente volverán los empleos y la dinámica comercial y económica. Tal vez con menor fuerza porque muchos empresarios cerraron, se quebraron. Es hora de pensar en las actividades del inmediato futuro. Algunas propuestas: medicina especializada, agroindustria, transformación agropecuaria, industrias creativas, destino universitario, eventos alrededor del apellido Capital Musical, turismo de naturaleza, construcción, comercio especializado y otras más. Pero sin esfuerzos conjuntos, mejor apague y vámonos.
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