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En aras de contribuir a las necesidades del país y la región en temas de infraestructura vial, la Universidad Cooperativa de Colombia – Campus Ibagué-Espinal consolidó la maestría en Infraestructura Vial.
El Tolima al ser en mayor medida rural, con el paso de los años requiere devengar un mayor número de profesionales que contribuyan al fortalecimiento de todas las vías, para impulsar la economía de la región, especialmente en la mayoría de los territorios donde se cultiva para comercializar productos agrícolas.
Con el apoyo de los directivos del programa de Ingeniería Civil, referentes nacionales e internacionales, la institución le apostó a este posgrado con el fin de contribuir a las dinámicas de la ingeniería en temas de conectividad terrestre, desde la formulación de alternativas que impacten de manera positiva la economía y el ambiente con el uso de materiales alternativos como reciclables.
Esta apuesta dirigida a los profesionales en ingeniería, construcción, arquitectura y urbanismo, permite comenzar a potencializar su perfil con un estudio posgradual de gran importancia y aporte al desarrollo físico.
Más que ser un proceso académico impacta a la región con el desarrollo de proyectos viales y la competitividad, pues Pedro Julián Gallego, Jefe de programa de la Facultad de Ingeniería civil, comentó, “cuando se habla de un magíster en Infraestructura Vial de la UCC, se hace referencia a una persona que se puede desempeñar formulando y diseñando proyectos de infraestructura vial de orden público y privado para brindar nuevas soluciones viales y de este modo hacer que aquellos recursos escasos se puedan optimizar y alcanzar mejores resultados a partir de las nuevas tecnologías. Igual va de la mano con el desarrollo y transformación de la región en cuanto a la infraestructura que tanto requieren nuestras comunidades”.
Por ejemplo, la persona que se especialice en esta área logrará comprender las nuevas dinámicas y tendencias globales que existen en cuanto a infraestructura sostenible y sustentable. Lo cual da como resultado la promoción de la economía solidaria y el asumir con responsabilidad la gestión de soluciones de infraestructura vial.
De ahí, que desde la academia se motive a pensar en cómo deben ser las nuevas exigencias de la infraestructura vial y de los materiales para comprender y solucionar nuevos retos.
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