“De la mano de la comunidad y la secretaría de Salud Municipal, realizamos una jornada de recolección en una vivienda que presentaba alta presencia de este molusco”.

Si bien este animal puede parecer inofensivo, en realidad es una especie invasora que produce efectos negativos en el ecosistema.

Según el ICA, esta especie compromete la producción agrícola en el territorio colombiano, debido a que “su naturaleza polífaga, éxito reproductivo y carácter invasor la hace capaz de colonizar efectivamente cualquier área, que por sus hábitos de dieta generalista le permiten consumir plantas, hongos y materia orgánica en descomposición”.

A su vez, también puede traer consecuencias adversas sobre la salud de las personas, en la medida en que transmite parásitos que afectan la zona intestinal.

La recomendación realizada por parte de Cortolima, consiste en no manipularlas, sino que por el contrario, dar pronto aviso a la Secretaría de Salud para que actúen de manera oportuna.