Tendrá este año un tinte de crucial para el Museo de Arte del Tolima: así como en diciembre cumplirá sus primeros 10 años al servicio de talentos de diversas latitudes y de la comunidad, se espera tener seguridad presupuestal desde los gobiernos.

Así lo indicó María Márgareth Bonilla Morales, directora de este recinto artístico, quien fue consciente de los grandes logros de 2012 y, no obstante, de lo que se pretende concretar este año teniendo recursos asignados.

“Ya pasó el año del empalme y de las dificultades tras los procesos con el nuevo gobierno, pero todo 2012 trabajamos muy de la mano con la Gobernación y la Alcaldía y abrimos las puertas a todos los proyectos que se presente con ellos”, dijo.

Y añadió que “buscamos que los proyectos empiecen en el inicio de año y los presupuestos estén asegurados desde enero (...). Está muy nutrido 2013 y esperamos tener la seguridad para no tener que sufrir como ahora”, expuso.

Lo anterior lo sustentó en la dificultad de que “a final de año salieron los convenios con los gobiernos local y seccional, por lo que debimos cancelar exposiciones como la de Alejandro Grau, ya que no había cómo traerlo”.

Según indicó, este año entre las más significativas muestras programadas están “del Museo Bolivariano de Santa Marta, el Nacional de Colombia, el de Arte Moderno de Bogotá, el Salón BAT y el fotógrafo Rubén Afanador, de los más importantes del mundo”.

Lo que ya fue

Al respecto de 2012, la Directora del MAT lo resumió como un año de “recuento histórico, fortaleciendo y apoyando toda la cultura, ya que las artes se nutren de las artes”.

Y destacó que no solo se enfatizó en fomentar, difundir y preservar colecciones y exhibirlas, sino, también, “dar cabida a artistas tolimenses, colombianos y extranjeros, y eso nos ha permitido dar una dinámica distinta a la ciudad”.

Así, con sus exposiciones y actividades específicas, “confirmamos la imagen en el país, pues se ha constituido en uno de los principales museos de Colombia. Es un logro para el equipo del MAT, la ciudad y el Departamento”.

“Esperamos -añadió- que la gente del Tolima se dé cuenta de las joyas que tiene, entre ellas el Museo, que si se apoyan y valoran como deben ser, se fortalecen para la proyección cultural y turística del país y del mundo”.

Y recordó, además, su designación como representante de los siete museos del Tolima ante la Mesa Nacional de Museos, con lo que se busca una mayor estabilidad para estos recintos.

“Se habló muchas cosas que suceden con los museos del país”, como el que tiene que “haber mayor representatividad en los consejos de cine, artes plásticas, música y patrimonio”, al igual que garantizar el apoyo de las administraciones.

Lo más recordado

El 22º Salón Tolimense de Fotografía, “importante porque muestra realmente cómo se puede en un mismo espacio mostrar el trabajo local y de otras latitudes, propuestas mucho más amplias y una dinámica más grande”.

También figuraron las muestras 'Arcanos', de Enrique Grau, y 'El erotismo y otras perturbaciones', de Joseph Urrego, 'Ariza: pintor de los Andes', Procesos II, de la Universidad del Tolima, y el 11º Salón de Fotografía de la Universidad de Ibagué.

Además, la del Primer Premio de Pintura Julio Fajardo, con Raquel Paz y Andrés Alarcón, entre otros, así como '¿Dónde está el perfume del árbol más reciente?', de Leticia Zubillaga, y la colectiva 'Transformaciones: espacios y percepciones desde la cerámica'.

Están también la del fotógrafo David Alfonso 'Truman' Bejarano; 'Negret', del fallecido escultor payanés Édgar Negret, y 'Anatomía de la Música', del colombiano Juan Camilo Arboleda y el turco Ibrahim Demir Isgoren.

Bonilla Morales destacó también la reapertura en diciembre de la Sala 1, de exposiciones permanentes, con obras de la colección del Museo y la Gobernación y de la donación Ortiz Salazar, así como la 3, de dibujos del Siglo XIX y mitad del XX, y la 6, de arte geométrico.

En lo audiovisual se tuvo el Cuarto Festival Audiovisual, la Quinta Imaginatón, la segunda fase de Colombia de Película, con el Ministerio de Cultura, y presentaciones artísticas de diversas índoles; de otra parte, siguieron los talleres de fotografía, dibujo y pintura.