Uno de los más importantes exponentes del arte en el Tolima y presidente del Museo de Arte del Departamento, Darío Ortiz, cuestionó, en una publicación reciente, que el mural “Nosotros los pijaos” no fue restaurado sino repintado.
En su artículo, sienta una voz de protesta ante lo que él describe como un “abusivo atropello a nuestro patrimonio que me permito afirmar que fue completamente sepultado bajo una reluciente pintura nueva”.
Dentro de sus argumentos, el pintor expresa que “no restauraron el mural como exigía el documento firmado, sino lo repintaron.
“Vi claramente y con tristeza profunda al asistente de Rosendo Gil repintar las líneas negras del mural mientras que su jefe brocha en mano aplicaba color sin piedad sobre la pintura de Triana. Color que se asemeja, pero que ni siquiera respeta el color original de la obra”.
Además, Ortiz culpa a la Gobernación de negligente por haber contratado un pintor y no un restaurador de piezas de artes para el caso del mural “Nosotros los pijaos”.
El pintor Rosendo responde a Darío Ortiz
Ante las acusaciones planteadas por Ortiz, el pintor Rosendo Gil Sanabria, quien ganó la licitación adelantada por la Gobernación precisamente para hacer la respectiva restauración, se defendió y aclaró punto por punto los cuestionamientos.
En una carta enviada a este medio, Gil Sanabria señaló que se respetaron todos y cada uno de los parámetros para intervenir la obra.
“Se adelantó la limpieza adecuada para la aplicación de los pigmentos, respetando los parámetros artísticos de la obra, a saber: textura, superficies, ritmo, color, planos, contornos, composición y recorridos lineales”, escribió Gil Sanabria.
Ante la objeción última de Ortiz, en cuanto al color original y la mala intervención en la obra, añadió el pintor que “el manto de la pintura original nunca se toca sino con disolventes y conservantes que pretenden recobrar su aspecto original” (ver carta completa en el recuadro).
Pese a las acusaciones y a las respuestas como tal, lo cierto es que el mural “Nosotros los pijaos” está a pocos días de ser terminado y hasta el momento, para expertos como el presidente del MAT, no ha gustado.
Pero, ¿qué es restaurar una obra de arte?
Una experta consultada por EL NUEVO DÍA, aclaró que el proceso de restauración y conservación de una pieza de valor histórico requiere todo un estudio para determinar cuáles son las condiciones actuales de la obra.
“A la pieza tienen que hacerle unas radiografías para conocer qué pigmentos se usaron, cuántas capas tiene la obra (…) es deber un estudio completo”, dijo Claudia Ortiz, directora del programa de Artes Plásticas y Visuales, de la Universidad del Tolima.
Agregó la docente que en cuanto al tema de los murales, además de lo anterior, se debe adelantar un diagnóstico de las condiciones del sitio, saber qué tanta humedad recae en la obra y cuánto tiempo lleva allí pintada.
Por último, la directora fue clara en afirmar que restaurar una obra no es lo mismo que repintarla.
Licitación adjudicada
Para la restauración del mural ‘Nosotros los pijaos’ de Jorge Elías Triana, la Gobernación abrió la convocatoria pública número 0180, la cual fue adjudicada para el pintor Rosendo Gil Sanabria.
El proceso alcanzó un valor de 25 millones de pesos, aunque el presupuesto era de 50 millones de pesos.
En su momento, según la secretaria Administrativa del Tolima, Carolina Hurtado, dentro de las condiciones se incluyeron todas las recomendaciones realizadas por el Ministerio de Cultura, al igual que las observacioçnes realizadas por el Consejo Departamental de Patrimonio.
El 12 de diciembre se abrió el proceso y el 21 se cerró, resultando aceptada la oferta de Rosendo Gil Sanabria, un pintor y escultor tolimense.
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