Más de mil niños, jóvenes y adultos demostraron ayer y confirmarán hoy que en la Capital Musical aún hay espacio para el canto, tal como sucede con el 6° Encuentro de Coros ‘Ibagué Capital Musical’, que lidera la institución educativa Amina Melendro de Pulecio, Conservatorio de Ibagué.

El maestro Florentino Camacho Valderrama, arreglista, director y docente, es uno de los anfitriones del encuentro, y de los más conscientes del papel que cumple para la actividad cultural que caracteriza la capital tolimense.

Orden del día

Es, en las palabras del maestro, “un espacio cultural donde los coros de la ciudad y la región pueden presentar el trabajo que adelantan (...). Va a ser una fiesta coral muy linda”, anticipa además sobre el concierto de hoy.

La segunda sesión comenzará a las 8 de la mañana, en el teatro Tolima, donde se prevé participen 16 agrupaciones -de las 23 que en total se han sumado a la convocatoria-, entre ellas los adultos mayores de la Secretaría de Bienestar Social de Ibagué, la Escuela de Música del Conservatorio del Tolima y la escuela artística Efac.

A ellos se sumarán otras agrupaciones formadas al interior del Conservatorio de Ibagué, entre ellos conjuntos de los grados Primero a Quinto, así como el Colegio Adventista, el Liceo Latinoamericano y el colegio San Bonifacio de las Lanzas.

“Me parece que es importantísimo que la ciudadanía sepa que en Ibagué todavía se canta. Había un rumor de que nuestro título de Capital Musical se está acabando y se está perdiendo, pero estos espacios culturales intentan de alguna manera rescatar esa actividad musical que el tolimense lleva en sus venas y aflora en cualquier momento”, añade el músico.

Y ello lo mide en que tenemos “gran cantidad de coros, orquestas y grupos, de excelente calidad; necesitamos espacios para presentarlos, y uno de estos escenarios para hacerlo es este”.

Más de mil

La intención es que, aunado a la idea de este encuentro, que es mostrarse a niños, jóvenes y padres de familia, sean más de mil personas las beneficiadas con el evento.

“Este encuentro está beneficiando aproximadamente a unas tres mil o cuatro mil personas -entre artistas y espectadores-”, asegura Camacho Valderrama.

Observación

 No obstante el esmero con que se organiza eventos como este, aún se hace urgente reclamar mayor educación musical hacia los niños y jóvenes que cursan su educación secundaria en planteles como el Amina Melendro de Pulecio, que constituyó la mayoría del público durante la sesión de ayer.

Durante el concierto, mientras los pequeños artistas se presentaban, no eran inevitables el denominado ‘cuchicheo’, las risas o el golpe de las sillas, situación que se ha hecho evidente en incontables presentaciones, por lo que se recomienda a las directivas guiar a sus jóvenes al respeto.