Es el segundo libro en su corta trayectoria, y en él relata episodios e información de varios viajes que esta comunicadora social tuvo durante casi tres años por Suramérica, el Medio Oriente, Grecia y Turquía.

“Trata sobre una gitana, observadora, a la vez periodista, a quien una mujer le cuenta historias que van cruzándose. Podría atreverme a decir que es una novela - reportaje con personajes e historias concretas, es algo muy de crónica, para dar al personaje diferentes estados de consciencia”, comenta.

Proceso propio y apertura de espacios

Y aunque la elaboración de este trabajo fue un proceso “muy autogestionado, a partir de una preventa de boletas”, con su publicación Violeta espera llamar la atención de quienes pueden apoyar esta práctica de las letras.

“Quiero hablar con patrocinadores y organizaciones, para que apoyen a otros jóvenes sin necesidad de que tengan que entrar a las grandes ligas. Este libro no es solo para tener la gloria de publicar algo, sino también para tener una editorial fuerte y alternativa”, añade.

Cree en lo literario

Violeta quiere plasmar en este libro, más que una exhortación a que se cambie los estereotipos sobre el gitano, a fomentar la esperanza en la literatura.

“Que la gente se convoque a la creencia de que la literatura tiene un futuro muy grande, y de que es el principio de muchas cosas”, sostiene.

Este segundo libro, además, “representa todo un cambio de paradigmas porque es una nueva forma de presentarme a la comunidad, no hay muchas escritoras jóvenes, por eso quiero aventarme a esta vocación”.