No importan los obstáculos. En la industria de la música se trabaja a diario para reivindicar las ideas, y por eso, son muchas las propuestas que llegan de los cuatro puntos cardinales de donde se destacan ritmos y sonidos propios. Algunos se atreven a incluir un ‘toque personal’ y es así como en la actualidad se conocen artistas que atraen la atención de distintos públicos por el hecho de identificarse en medio de la diferencia.

Este es el caso de Teo Flórez, un tolimense quien desde muy pequeño estuvo ligado a la música cuando sus padres le infundieron el gusto hacia los aires clásicos, y por eso estudió su bachillerato en el Colegio Musical Amina Melendro de Pulecio, en el que escogió el piano como instrumento que sería base para su desarrollo musical; no se detuvo e incursionó en otros como la guitarra, el bajo y la percusión que le generaron posibilidades como participar con tan solo 14 años en un taller internacional de Dirección sinfónica.

Sin embargo, no se quedó en esta esfera en la que ejercía como músico, y decidió trasladarse a la capital de la República para incursionar en el mundo de la Ingeniería de Sonido, faceta que aunque muchos piensan es nada más para mover cables y oprimir botones, “te encuentras con otras áreas importantes (...) incluso entré pensando que iba a hacer sólo música, sólo DJ, y te chocas con algo más hasta que te preguntas ¿qué es esto? Esto es otra cosa”, confesó Flórez.

Son tantas las oportunidades...

Y hay que aprovecharlas. Teo en su recorrido entendió que más allá de construir una imagen como artista también estaba la posibilidad de generar espacios para que otros como él, llegaran a la atmósfera profesional, y así fue que la producción llegó para quedarse. Trabajó con ingenieros ganadores del Grammy latino, entre otros, quienes impulsan a artistas de como Andrés Cepeda y Totó la Momposina, Piso 21 y Galy Galeano; de ahí aprendió lo necesario para regresar a su ciudad natal y emprender un nuevo camino en el que contribuyera a quienes tienen futuro pero no cuentan con las condiciones necesarias.

“En Ibagué hay mucha gente que hace música, siento que vienen cosas muy grandes para la ciudad”, agregó Flórez, quien además enfatizó en que es necesario recuperar el título de Capital Musical porque tristemente se ha perdido gracias a la falta de interés del Estado y los mismo ibaguereños que tampoco se preocupan por conocer su historia y mantener las tradiciones. “Hasta aquí han llegado artistas de Estados Unidos y África a grabar, mientras que los aquí piensan distinto (...) si tú no vienes para hacer historia, nunca viniste”.

¿Qué se necesita para ser artista?

Según Teo, basta con tener ganas, disciplina, poseer talento y adquirir 15 minutos de fama. “Mi propósito es colaborar desde mi conocimiento así no haya como base dinero, algunos creen que sin dinero no se puede hacer nada, yo creo que mientras aportemos en conjunto lo logramos, aunque no quiere decir que sea gratis, aquí tienen ese imaginario, pero la idea es iniciar con la grabación de una o dos canciones y de ahí en adelante avanza el artista (...) existen plataformas gratuitas, pero no conocen cómo se hace, ahí entro yo y aporto”, sostuvo.

“Hay que hacer algo diferente”

Aunque hay artistas que deciden irse a otras ciudades para alcanzar logros, Teo Flórez enfatizó en la importancia de quedarse aquí y creer en lo propio. “A la gente le da miedo, pero estamos abriendo mercados en vez de irnos”, finalizó.

Dato

Actualmente está trabajando con el émulo de Maluma y artistas provenientes de África y Estados Unidos que arriban a Ibagué.