Actualmente no se está hablando de oficinas sino, más bien, de espacios colaborativos, un concepto que se basa en la idea de ofrecer a los empleados recintos diferentes para desempeñar sus funciones de distintas formas.

Esta evolución, catalogada como una tendencia mundial que se impone en Latinoamérica, permite el normal desarrollo de tareas, no sólo en un puesto de trabajo sino, además, en espacios diseñados para que se pueda compartir con colegas e involucrarse en diferentes equipos.

Según Francisco Walteros, de Multiproyecto, entre las bondades de esta tendencia está el aumentar la productividad y potenciar la creatividad. "En estos espacios colaborativos los empleados tienen la opción de llegar a su lugar de trabajo sin tener una ubicación específica en un espacio mucho más abierto".

Es por lo anterior, que en el tema de arquitectura de los espacios laborales las novedades están orientadas al diseño de zonas libres y abiertas. Cada vez más el concepto es el de plantas multifuncionales en los edificios, sin barreras ni restricciones a la libertad de movimiento, muy flexibles para adaptar los equipos de trabajo y acompañados de mobiliario que responda a las necesidades de cada dependencia de la empresa.

De acuerdo con Francisco Walteros, estas tendencias en el país se reflejan en el notable desarrollo que hay de conceptos de oficina abierta.

"Aún hay un trabajo importante por hacer en temas como el desarrollo de proyectos de grandes magnitudes, que se ejecutan en otros países, pero en todos los temas de tecnología y en todo lo que tiene que ver con la producción, el diseño y el desarrollo de mobiliario, el país marca la pauta en la región", anotó.