Un limón partido en pequeños cuadros, trozos de fruta, ron blanco o añejo, azúcar al gusto, hielo y hojas de yerbabuena, son la mezcla perfecta de un mojito, acompañado de una melodía, buenos amigos o la pareja, con quienes pueda diálogar o disfrutar una agradable noche.

Además, si su gusto es más exigente o fuerte, la mezcla de jugo de naranja, granadina o agua de cereza y whisky, debe ser su elección cuando desee invitar a un acompañante a compartir un ambiente agradable y una bebida deliciosa, preparada por el barman que agradarán su paladar.

Según los gustos de los consumidores ibaguereños y turistas pueden compartir en variados sitios de toda la ciudad una charla y un buen momento, con bebidas creadas en las manos de los expertos, con licor, sin licor o a base de café, estas últimas muy apetecidas, todas a bajos precios.

La variedad de bebidas frías parten de las hechas a base de café como el frappé de café, el capuchino, el mocachino; encuentra además cocteles o mezclas con licor como el dry martini, el mojito, en sus diferentes presentaciones dependiendo de la fruta acompañante, el carajillo, el cosmopólitan, el daiquiri, el orange day, y para los enamorados, el amor perfecto, caracterizado por un corazón en el capuccino.

Para paladares exigentes

Para las diversas preferencias, según Miguel Ángel Contreras Naranjo, técnico de Mesa y Bar del Sena Regional Tolima, y barista de Yerbabuena Café Lounge, la preparación de un excelente coctel para complacer a los clientes, radica en el empeño y la pasión del preparador para no pasar por alto ningún detalle, sin olvidar la presentación de la copa, porque al cliente se enamora con una agradable decoración, además de la rapidez y práctica al momento de preparar cualquier apetitoso coctel.

Suele suceder que la solicitud del cliente depende de la decoración de frutas o pequeñas sombrillas que engalanan la copa del compañero ubicado en la mesa de al lado, optando no por gusto una bebida en especial, sino por la presentación que acertadamente la copa lleva.

Miguel, cuenta que el dry martini, cuyo costo es de 14 mil pesos, es el padre de la coctelería, donde el profesional combina ginebra y vodka, revolviendo los dos licores en el mezclador, para servirlo en una copa de martini decorado con una aceituna.

Más recetas

Jamaiquino: con ingredientes conseguidos en cualquier supermercado, las personas amantes por las preparaciones de la cocina pueden hacer un verdadero placer, agregando al granizado de café piña colada al gusto, decorando el vaso o la copa con un trozo de piña para darle elegancia al servir.

Mojito: un limón picado en cuadros pequeño debe ser macerado o aplastado junto con azúcar, hojas de yerbabuena, y la fruta de su preferencia partida igualmente en trozos pequeños, adicionándole ron blanco o añejo y un poco de soda. Hojas o una rama de yerbabuena es la decoración perfecta para esta bebida fría y con licor.

Orange day: es la mezcla de jugo de naranga, wiski de la preferencia y agua de cereza, en una copa decorada con una tajada de carambol.