Laura Marcela Villamil Montaña hace dos noches se despidió de su año de reinado Departamental del Folclor, periodo que cambió por completo su vida, haciéndola más madura y segura de sí misma. Ahora emprende su nuevo reto: traerle la tercera corona Nacional del Bambuco al Tolima.

En Neiva estará del 26 al 29 de junio, y está segura que hará historia llevando todo el fervor pijao.

Su clave para repetir la ‘hazaña’ lograda por Luz Teresa Zamora y Gloria Helena García Cruz, en 1971 y 1999, radica en la rigurosa preparación a la que se ha sometido.

Desde diciembre, en Bogotá, está trabajando con uno de los parejos más reconocidos del país y uno de los más ganadores del Reinado Nacional del Bambuco: Julián Mahecha.

De su mano aprendió todos los pasos del Sanjuanero huilense y siente que lo muestra en perfección, incluyendo la mirada pícara que cautiva.

“Al principio me dio duro pasar a otra modalidad de baile, saber otra cultura, pero lo aprendí y llego a la tierra opita con la plena convicción de traerme la corona”, refirió al mencionar que lo interpretará luciendo un bello traje diseñado por Mauricio Castellanos.

Además de lograr una impecable ejecución de esta exigente danza, la preparación de Laura Villamil incluyó pasarela, y conocimiento cultural del Tolima Grande.

En Ibagué se está cumpliendo la segunda fase de su entrenamiento real, el que tiene que ver con la investigación y montaje de la muestra folclórica que presentará. Aunque quiere conservar la sorpresa, anunció que la manifestación folclórica incluirá bambucos, guabinas y sanjuaneros.

“Vamos a llevar cosas muy autóctonas e interpretaré varios instrumentos musicales”, dijo.

Sumado a ello, la representante tolimense está segura que su carisma hace parte de sus fortalezas para la disputa real. “Voy bien preparada, pero pienso que la reina debe tener actitud, y yo la voy a tener, porque me gusta este reinado y siento que es una responsabilidad con mi Departamento”, acotó.

“Un sueño cumplido”, define haber sido reina departamental del folclor

¿Qué le dejó el año de reinado?

Muchas experiencias bonitas, ya que era lo que más anhelaba.

Así mismo me enseñó a ser más responsable, respetuosa, y amar más a mi cultura.

¿Fue cómo lo esperaba?

Sí. Fue un año inolvidable que me dejó un crecimiento personal muy grande.

Además de portar la banda y la corona, ¿qué hizo como reina?

Asistí a todos los eventos a los que fui convocada, y dediqué mi tiempo a incentivar la cultura y el rescate de las tradiciones de nuestros ancestros.

¿Qué se le acabara el reinado le dio nostalgia?

Un poco, pero sé que los recuerdos y la experiencia permanecerán en mi mente y mi corazón.

¿Qué le dice a su sucesora?

Que sabemos que será una verdadera embajadora de nuestro folclor.