Yina, al borde de una parálisis facial

COLPRENSA - EL NUEVO DÍA
La polémica exparticipante de ‘Protagonistas’ se autoinyectó silicona industrial en su rostro, lo que le provocó una deformación. En una cirugía le extrayeron cinco centímetros cúbicos de biopolímero.

El exceso de vanidad de Yina Calderón por poco acaba en tragedia. No conforme con las múltiples cirugías que se practicó el año pasado para estilizar sus facciones, la polémica exparticipante de ‘Protagonistas de Nuestra Tele’, con jeringa en mano, se autoinyectó un producto que le habían recomendado para darle volumen a su mentón.

La tarde del jueves 11 de junio, Leonela, su hermana, la encontró a punto de realizar el insensato acto quirúrgico que le deformó la cara al instante. “Cuando llegué a la casa Yina tenía un tarrito blanco y una jeringa. Me dijo que se suministraría dicha sustancia para que la cara se le viera más delgada. Unos minutos después le empezaron a salir unas bolitas, así que llamé a mi mamá y a la cirujana y la llevamos a la clínica”, narró su familiar. Eran los primeros minutos de las diez próximas horas de agonía.

Hacia las 3 de la tarde del día mencionado, Yina ingresó a la Clínica Estética Sanesa, al noroccidente de Bogotá, con un diagnóstico poco alentador: Lo que se había inyectado, según su doctora de cabecera, era biopolímero. La cirujana estética Paola Borja Correa aseguró que el componente con el que pinchó su cara le causó una deformación.

Luego de la cirugía donde le extrajeron cinco centímetros cúbicos de silicona industrial, Yina permanece bajo observación en su casa.

En un video, la huilense manifestó que fue una decisión equivocada. “Hago un llamado a que tengan cuidado para que no les pase mismo que a mí”. También pidió disculpas a su doctora y a su mamá, calificando su acción como “irresponsable e inmadura”.

En 2014, Yina Calderón fue protagonista de la prensa rosa colombiana a raíz de su cambio extremo. Se dijo que habían sido siete cirugías, pero su cirujana tiene una versión distinta. “En realidad fueron dos procedimientos divididos en varias partes: se perfiló el rostro y se practicó lipoescultura general, cuya grasa succionada sirvió para dar volumen a sus glúteos. La que tomó hoy fue una decisión mal asesorada por un amigo, pues debió haber acudido a nosotros para una valoración”.

Credito
COLPRENSA

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