Estar en comunión con la naturaleza, respirando su aire puro y a su vez poder obtener una descarga de energía y adrenalina, lleva a cientos de personas a desconectarse de la vida citadina, para refugiarse en deportes de aventura, como el canyoning.

La práctica de esta disciplina extrema ha cobrado tanto auge en Ibagué que ya se cuenta con una ruta que debela la belleza de pulmones naturales como el Cañón del Combeima, Payandé, El Totumo y El Salado.

Estos circuitos pueden ser seguidos por públicos de todas las edades de la mano, de entidades como Ibagué Extremo que tiene estructurada una agenda para la práctica del canyoning, deporte que involucra caminata, rápel, saltos a pozo, toboganes naturales, descenso de cascadas en cuerda y canopy o tirolina.

El desarrollo de esta actividad que revitaliza cuerpo y mente dura en promedio ocho horas, empezando a las 7:30 de la mañana. Las rutas de canyoning en La Musical están en servicio todos los días. Los recorridos se logran con grupos mínimo de cuatro personas.

¡Prográmese!

Cada lugar, como es de esperarse tiene su encanto, y en él, el tiempo se pasa volando.

La puerta al Nevado del Tolima a través de su recorrido cuenta con varios puntos preparados para la práctica del canyoning, el más extremo Esplendor, vía a Pastales. En él, el estado físico y los nervios de acero imponen su sello, puesto que las personas pasan por debajo del manto de la cascada.

Unos metros más arriba se erige la ruta Honda, cerca a Iguaima, y La Rivera, está ultima en la que el aventurero puede degustar de la gastronomía y admirar en todo su esplendor el río Combeima a 300 metros de altura al pasar por un teleférico panorámico.

El otro punto de la ciudad es Payandé, cuya ruta Calarcá involucra siete cascadas habilitadas para disfrutar de este deporte extremo, en un espacio de clima templado de agua muy cálida, donde el visitante puede dar saltos a diferentes alturas.

La otra alternativa se encuentra en el Corredor Norte, es decir, en El Salado. En ese lugar el trayecto más especial es Jahuo, donde el agua cristalina y las hermosas cascadas son inolvidables y placenteras, al igual que ocurre en la ruta de El Totumo.