Desfile de silleteros: tradición y orgullo paisa en Ibagué

JORGE CUÉLLAR - EL NUEVO DÍA
Los silleteros de Santa Elena, Antioquia, dicen sentir un orgullo inmenso al saber que de nuevo son quienes abrirán el desfile de San Pedro en Ibagué.

Desde hace más de 14 años los silleteros han sido una parte importante del desfile nacional de San Pedro, en Ibagué.

Estos paisas que se desplazan desde Santa Elena, un colorido corregimiento de Medellín, dicen sentirse muy orgullosos de ser parte de este tradicional desfile y además, haciendo gala de un trabajo que llevan toda la vida exhibiendo.

Algunos de estos silleteros llevan más de 30 años, cultivando flores, elaborando silletas y viajando a cuanto desfile son invitados.

En el desfile de San Pedro son 25 silletas que encabezarán con mucho color y creatividad este evento.

 

La elaboración

Hay varias categorías en la elaboración de las silletas, comercial, monumental, tradicional y emblemática, y con cada una de ellas el proceso de elaboración es diferente: en Ibagué solo se presentarán silletas comerciales.

Fabián Atehortúa Hincapié, uno de los silleteros que llevan la tradición en las venas, y quien desde hace 14 años participa en el desfile en Ibagué, indicó que todo inicia en Santa Elena, con la consecución de todos los materiales: flores, madera, cartón, pinturas, y todo tipo de pegantes.

Allí elaboran la delineación y el diseño sobre el cartón y pegan sobre este la flor llamada viri viri, una de las que se dejan pintar, porque, al ser comerciales, cada logo tiene un color específico.

Ya en Ibagué, a la par que ellos van puliendo los diseños sobre el cartón, y se va pintando, se va armando la estructura en madera; según los silleteros, la sola estructura pesa alrededor de 25 kg.

Luego, con la estructura armada y con la silleta pintada, sobre el diseño establecido, comienzan a poner las flores vivas sobre la silleta, para darle el aspecto final; allí utilizan pompones, margaritas y solidagos, entre otras.

Todos los materiales los traen desde Santa Elena, porque para ellos es más económico que todo sea de allí que comprarlo en Ibagué; según explicaron, mientras un frasco de pegante cuesta en Medellín 17 mil pesos, en Ibagué cuesta más de 30 mil, y así, en general, ocurre con la mayoría de materiales.

 

Una tradición

Álvaro Hincapié y Germán Soto Atehortúa, quienes participarán en el vibrante desfile, llevan 40 años con la tradición de las silletas.

Ambos coincidieron en que Santa Elena es una tierra de flores y que en tiempos pasados, cuando no tenían más para bajar las flores desde Santa Elena para Medellín, lo hacían con su cuerpo.

En pequeñas silletas, una especie de silla que se colgaba a la espalda, amarraban las flores para poder llevarlas a la capital para su venta.

“Una vez mi papá me contó que un señor se le dio dizque por hacer un desfile así porque sí, de más o menos tres cuadras, en una silletica tenía amarrados tres o cuatro ramitos y les pareció bonito eso y de ahí se antojaron y comenzaron a hacer las silletas más elaboradas, y las fueron mejorando hasta lo que conocemos hoy y comenzaron a tener contratos con los pueblos, las ciudades, con todas partes”, indicó Soto.

Además, sienten un orgullo inmenso de llevar la tradición de las silletas, y de tener la sangre paisa, de que su trabajo sea reconocido hasta en el extranjero.

Credito
EL NUEVO DÍA

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