Según el diario La República, Colombia es el centro de atención, luego de que el presidente Duque retirara el proyecto de reforma tributaria, que buscaba mitigar el bache fiscal ocasionado por la crisis derivada de la pandemia.

La agencia Standard & Poor’s (S&P) Global Ratings, redujo el pasado miércoles la calificación de la moneda colombiana, pasando de BB+ a BBB-, lo que deja al país con una perspectiva muy negativa en el exterior, además predijo que el ajuste fiscal será más prolongado y gradual de lo esperado.

A esta calificación se sumó la de la agencia Fitch, que puso a Colombia en el rango de grado de inversión más bajo, con una perspectiva negativa, mientras que para Moody’s está dos niveles por encima de “basura”, según lo informó La República.

“El momento exacto es difícil, y la conclusión es, en cambio, que creemos que la rebaja se acerca lo suficiente como para que los mercados negocien con ella”, dijo Simon Weaver de Morgan Stanley, quien también predice que Fitch será la segunda calificadora en degradar a Colombia a “chatarra”.

Estas calificaciones son determinantes para la inversión extranjera, y el pertenecer a la categoría “basura”, es un agravante para que los inversores no depositen su dinero en Colombia.