En medio de recuerdos y el aroma del café que acostumbra acompañar una buena conversación, el santaisabelino Héctor Galeano, compartió una pequeña parte del trabajo que adelanta desde hace 30 años; desempolvando rocas.

Aunque el arte rupestre data de hace 40.000 años, en la región cada vez se hallan rocas de gran magnitud con varias imágenes que pintaron o grabaron, al parecer las tribus indígenas. Puntos consecutivos, espirales, animales, o la aparente figura humana, son de las más comunes en lo que se puede apreciar hasta el momento.

La información que ha recopilado el docente, promotor cultural e investigador para conocer al igual que comprender, la historia que puede haber detrás de cada dibujo e identificar nuevos lugares donde reposan las estanterías no dan abasto.

Aunque, en una mochila el maestro guarda varios archivos entre ellos fotos, que le permiten narrar algunas de las aventuras que ha vivido hasta el momento y la importancia que las comunidades se integren a la preservación de los pictogramas y petroglifos que hay en la región. 

Entre Prado, Dolores y Alpujarra, está el corredor rupestre donde hay una gran cantidad de rocas que posibilitan conocer el arte prehistórico. Una manifestación cultural de la que pocos hablan. En Purificación también se encontraron algunas.

“Un día salimos con unos estudiantes e hicimos varios recorridos, se encontraron varias imágenes y cuando ya nos íbamos nos dimos cuenta que faltaba uno (alumno), y empezamos a buscar ese ‘vergajo’ que de un momento a otro nos empezó a llamar y fuimos a ver qué le pasaba y había descubierto una serie de puntos que llamó calendario, por la cantidad que eran y su forma de estar organizados” recordó, Galeano.

Pero, qué puede decir una figura de estás que se halla en zonas selváticas donde no se transita con frecuencia, a ciencia cierta no se sabe. Hay quienes las asocian con una forma de comunicación prehistórica, la cosmología o la esencia humana, aunque, cada persona se encarga de dar un significado a lo que aprecia.

Potenciador cultural 

Un estimado de 250 figuras se hallaron pero quedan miles por encontrar ya que algunos territorios por las restricciones que ocasionó la violencia son ‘vírgenes’ y recorrerlos permitiría seguir enriqueciendo la historia de la región.

Por ello, acceder a las montañas tolimenses, de paseo o en labores de reconocimiento del territorio son buenas excusas para descubrir esas inexplicables imágenes.

La idea y en lo que trabajan es que el turismo sea cómplice de la cultura para que más personas conozcan el patrimonio cultural. Una experiencia natural, aprovechando las riquezas culturales e históricas que contribuye a la preservación de las raíces que en muchas ocasiones no se tiene en cuenta.

DATO

Estas imágenes hacen parte del archivo histórico que Galeano conserva y que las personas pueden apreciar en los diversos municipios. 

¡Hagamos región y apoyemos lo nuestro!

Lo invitamos a seguir leyendo aquí: https://digital.elnuevodia.com.co/library