Así lo indicó en un comunicado en el que afirma que autorizó a su hijo para que usara el carro, que se supone solo está disponible para el alto jurista, ya que debía realizar unas diligencias en compañía de su novia.

“En ese momento él estaba adelantando diligencias para el viaje al exterior que tenía programado al día siguiente. Conducía la camioneta blindada asignada a mi despacho de magistrado de la Corte y lo hacía, por su seguridad y bajo mi autorización, porque a esa hora de la noche ya no contaba con conductor que lo transportara”, señaló.

Miranda negó las versiones según las cuales su hijo fue detenido por realizar actos obscenos.

Por su parte, el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Humberto Guatibonza, dijo que cuando los uniformados llegaron, una de las dos personas se negó a identificarse, lo que es considerado una contravención al Código de Policía.

Tras la conducción al CAI, el muchacho llamó al magistrado y le indicó que había sido supuestamente golpeado durante el procedimiento policial.

“En el CAI, en reacción humana que tendría cualquier padre preocupado por la integridad de los suyos, me exalté al ver las heridas en su rostro. Como papá y ciudadano reclamé y exigí las explicaciones del caso a los patrulleros que, según Luis Gabriel, lo agredieron”, dijo Miranda.

De acuerdo con el relato del magistrado, los patrulleros negaron haber golpeado a su hijo y “trataron de acomodar la escena y de acusarlo a él de supuestas agresiones contra los patrulleros que no observé en ninguno de ellos”.

“Perplejidad me causa la noticia según la cual uno de los uniformados resultó herido e incapacitado. Esa manifestación me hace reiterar una vez más el sentido de perversión e instinto de los patrulleros por tratar de encubrir la grave falta en que incurrieron. El agredido fue mi hijo”, precisó.

El magistrado relató que después de un tiempo en el CAI tratando de resolver la situación, los policías devolvieron el documento de identidad a su hijo y salieron del lugar sin que le hicieran “ningún tipo de requerimiento, limitación o restricción de su libertad”.

El presidente de la Corte indicó que al día siguiente, jueves 23 de octubre, le manifestó a la coordinadora de seguridad del Palacio de Justicia, mayor María Niyelena Hoyos Medina, una protesta por los hechos.

“No es verdad como se afirma en algunos medios que el Presidente de la Corte Suprema de Justicia ‘violando los protocolos’ haya sacado a su hijo del CAI. En ese momento no estaba privado de la libertad, ni existía motivo por el que debiera permanecer allí”, apuntó.

Miranda insistió en que “no es cierto que mi hijo haya sido sorprendido en flagrancia realizando ‘actos obscenos’ dentro de la camioneta. Desde la parte exterior de estos vehículos blindados no existe visión hacia adentro, porque la impiden los vidrios polarizados”.

Finalmente, el magistrado indicó que su hijo salió del país en un viaje programado con varias semanas de anticipación.

La policía de Bogotá ya se encuentra investigando el incidente.