Tras las recientes declaraciones del alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo contra esta Casa Editorial, la Fundación para la Libertad de Prensa (Flip), a través de una carta abierta dirigida al mandatario, declaró, una vez más, su preocupación por el ambiente adverso al ejercicio de la prensa que se vive en Ibagué.

Para la organización, la accidentada declaración en la que Jaramillo, de manera tácita y hasta temeraria, sugirió que podría cerrar las instalaciones de este rotativo por cuenta de supuestos incumplimientos sanitarios, puede ser entendida “como retaliación contra los medios de comunicación que son críticos de su gestión”.

Como antecedente, la Fundación señaló que el Alcalde no ha tomado los correctivos necesarios para que se promuevan discursos favorables para garantizar el ejercicio de la labor periodística. Esto pese a los repetidos llamados de la Flip a controvertir de manera sana sus desacuerdos con la prensa, ya que, en caso contrario, termina por alimentar el clima adverso que se ha generado en el municipio a raíz de las estigmatizaciones por parte de funcionarios.

Según las cifras de la Flip, en cabeza de Pedro Vaca, director ejecutivo de la organización, durante este año se han registrado 18 ataques contra la prensa en Ibagué que ponen en riesgo el derecho a la libertad de expresión.

Excusas públicas

En entrevista con Blu Radio, el alcalde Jaramillo ofreció disculpas públicas por su declaración, a la vez que enfatizó en que es un defensor de la libertad de prensa. Al respecto, la Flip consideró que debe ir más allá y tomar acciones para mitigar el ambiente hostil.

“Pido las disculpas que sean necesarias, porque de ninguna manera ha sido esa mi intención, nunca lo será y me disculpo porque no tengo ningún problema en rectificar si mis palabras pudieron haber dejado el más mínimo sentido de que yo estuviera tratando de cerrar un periódico. Ni lo puedo hacer ni nunca lo haría, porque estaría en contra de todos los principios que me han guiado”, aseguró el mandatario.

Contrario a la actitud irascible que lo ha caracterizado y con el ánimo de zanjar cualquier controversia, Jaramillo Martínez reconoció que el comentario, enunciado el pasado miércoles durante el desarrollo del Día sin Carro, no debió haberlo pronunciado y lamentó que haya sido “malinterpretado”.

Luego recalcó que durante su vida pública ha sido un hombre respetuoso de la democracia y defensor de los derechos individuales y civiles.

En la intervención radial, Jaramillo no habló sobre los calificativos empleados contra Claudia Melo, reportera asignada a la cobertura de la Alcaldía, quien fue víctima de su explosivo temperamento en agosto pasado, cuando, tras un evento, se refirió a ella como “chiquita y enredadora”.

Recordemos que la despachada contra el Diario ocurrió cuando la periodista le preguntó a Jaramillo sobre los diálogos con el Ministerio de Hacienda para el saneamiento de la USI y la construcción de la nueva Unidad de Salud en Picaleña. Ese día, como en otras ocasiones, el dirigente se negó tajantemente a entregar declaraciones a este periódico por desacuerdos en el manejo de la información.

Tanto en la entrevista como en una carta abierta a los medios de comunicación, publicada a través de su cuenta de Twitter, el Alcalde indicó que no ha amenazado con censurar este rotativo y “mucho menos soy partidario de que se acallen las voces críticas que, para nosotros, son un aliento para mejorar todos los días”.

La molestia del Alcalde

En la misiva, Jaramillo reiteró que su malestar con la prensa y su cobertura noticiosa radica en que, según él, no ha sido consultado como fuente oficial para el registro de hechos o acciones que lidera el Municipio. Además, se ha declarado inconforme porque, según explicó, no se ha destacado, como a él le agradaría, los logros y los aspectos positivos de su Administración.

Y consideró: “Mi decisión de no hablar con reporteros de un medio de comunicación se debe a que, en reiteradas ocasiones, he visto cómo se vulnera el derecho que tengo como servidor público a responder las acusaciones que contra mí se hacen todos los días”.

A juicio del mandatario, resulta conveniente que en Ibagué se abra un debate sobre las pautas del quehacer periodístico respecto a la búsqueda de fuentes documentales y la contrastación de fuentes.