Primero hay que saber que esta es una figura que opera en Colombia, desde que fue reconocida por la Corte Constitucional a través de  la sentencia C-728 de 2009, y se apoya en el artículo 18 de la Constitución que señala que nadie será obligado a actuar en contra de su propia conciencia.

El derecho pueden reclamarlo los jóvenes que por profundas y sinceras razones éticas, filosóficas, religiosas o morales consideren que no deben prestar el servicio militar obligatorio.

Sin embargo, no toda manifestación de reserva de conciencia es suficiente motivo para eximirse del servicio militar, debe estar basada en razones concretas, que pueden consistir en pertenecer a una determinada comunidad religiosa o por razones humanitarias, entre otras.

Dado que el servicio militar obligatorio es un deber de todos los colombianos, los jóvenes que quieran ejercer su objeción de conciencia deben definir su situación militar y demostrar que cumplen con las circunstancias eximentes ante la Comisión Interdisciplinaria de Objeción de Conciencia creada por el Ministerio de Defensa.

Según Leidy Catalina Duque Salazar, docente investigadora del Colegio Jurídico y de Ciencias Sociales de la Institución Universitaria Colegios de Colombia, Unicoc, para reconocerse como objetor de conciencia deben reunirse documentos y elementos de prueba que acrediten la sinceridad de las convicciones. Entre ellos están: 

• Datos personales del objetor.
• Las razones por las cuales se objeta.
• Los documentos que prueban la exteriorización de sus convicciones (usualmente fotos o registros que sirvan como prueba)

El día internacional de la objeción de conciencia se realiza todos los años, para reconocer el derecho de que se niegan a tomar las armas y participar en la guerra.