‘El buen hijo vuelve a casa’. El defensor tolimense Frank Lozano adelantó durante dos semanas prácticas con el Quilmes de Argentina, una oportunidad que no dejó escapar. Sin embargo, la ‘aventura’ terminó y en el regreso a su casa, el Murillo Toro, el tolimense, cuyo pase pertenece a su progenitor, está a la espera de integrar el Vinotinto y oro para el segundo semestre del año.

“Tuve la oportunidad de estar en otro club, una bonita experiencia que se ve por allá, se entrena de forma diferente y se gana en partes física, técnica y mental. Ahora estoy de nuevo en Tolima, esperando las órdenes del profesor Castro”, afirmó Lozano.

Y agregó: “El contacto lo hizo mi papá y existió la posibilidad de probarme allá; además, aquí no nos definían nada y no se llegó a un acuerdo, mi padre tomó la opción de ir a Argentina. Soy un obrero más que lucha por su sueño, recorrimos, entrenamos y tuve buenos conceptos de los profesores”.

En cuanto a volver a vestir la vinotinto, “estamos hablando con el gerente Ricardo Salazar, espero llegar esta tarde (ayer) a un acuerdo con el equipo y firmar; espero formar parte del plantel con un contrato y estar en el grupo para que me tengan más en cuenta”, aseguró.