Dice un dicho popular que ‘El que es, no deja ser’, y ese le cayó anoche como anillo al dedo al Deportes Tolima, ya que hasta la última fecha de la fase regular de la Liga Águila 2017-I dejó una imagen negativa.

Frente a La Equidad, ayer en el estadio Manuel Murillo Toro, nuevamente, como ocurrió durante la mayor parte del campeonato, el Vinotinto y Oro comenzó su partido con el pie derecho. Se veía que tenía los tres puntos en el bolsillo. Pero al final, no pudo celebrar.

En esta ocasión no perdió. Fue un empate 1-1, pero con pinta de derrota, toda vez que la escasa afición que se dio cita en el ‘Coloso de la 37’ quería ver ganar a los ‘Pijaos’, antes de que afronten el único reto que les queda en disputa: La Copa Sudamericana.

Incluso, los jugadores habían indicado que deseaban culminar su participación en el ‘Apertura’ con la cabeza en alto, y así subir su moral, para llegar motivados al certamen internacional.

Sin embargo no fue así. ‘La Tribu’ en el primer tiempo marcó su tanto a los 34, cuando el recuperado Santiago Montoya se animó a patear desde afuera del área, y acomodó la esférica ajustada a un palo, imposible para el portero.

Y Tolima pudo marcharse con un 2-0 a favor en el descanso, cuando César Quintero marcó un golazo de media distancia que no fue validado por el juez de línea en occidental, al considerar que la pelota no entró por completo al arco. Equivocación total del colegiado.

Para la segunda mitad, el Vinotinto y Oro no fue capaz de aumentar la ventaja, a pesar que La Equidad se quedó sin un hombre por la expulsión de Walmer Pacheco a los 50. Pero aún así, los visitantes sorprendieron con el 1-1.

Diego Valoyes se encargó de capitalizar un mal rechazo de la defensa en un centro ejecutado en un tiro libre (79’). Baldado de agua fría, toda vez que un par de minutos antes, Ángelo Rodríguez ratificó su pésima temporada al desperdiciar un tiro penalti.

El técnico Óscar Héctor Quintabani movió la banca, pero la victoria nunca llegó, y eso lo debe tener muy preocupado, debido a que el próximo jueves se jugará su continuidad cuando enfrente al Bolívar de Bolivia, por el partido de vuelta de primera ronda de la Copa Sudamericana, recordando que en la ida ganó 2-1 en Ibagué.

Así las cosas, el estratega deberá preparar muy bien a su grupo para el reto de competir en la altura de La Paz, a donde el equipo viajaría el mismo día del partido, aunque llegaría el martes a Santa Cruz para alistar el decisivo choque, el cual le permitiría salvar un semestre que está perdido hasta el momento.