belkys p. esteban c.

¿Por qué terminaste tú última relación de pareja? “Es que él quería que me fuera con él a estudiar a Estados Unidos y yo no quería eso”, comenta Diana, de 17 años.

Al ser cuestionado con la misma pregunta, Sergio, de 18 años, asegura: “es que mi novia era muy intensa, me escribía cosas todo el tiempo y quería que la acompañara a todas partes como un perrito”.

Estos dos chicos tienen claro algo importante: para disfrutar del amor no es necesario estar juntos todo el tiempo, ni hacer todo unidos como si fuera físicamente imposible separarse. Puede que el amor se sienta un poco así por esta época, pero lo más importante es disfrutar, pasarla bien con la pareja, que la pareja también la pase bien y eso es todo.

“En la adolescencia los romances son intensos y eso está bien, son experiencias que los chicos y chicas deben vivir, pero es importante desde niños y niñas enseñarse que la autonomía sobre el cuerpo y las decisiones que se toman son importantes y que la verdadera razón del romance es vivir experiencias agradables”, explica la coaching Camila Díaz, quien, curiosamente, no pasa de los 25 años.

“Lo que pasa es que a veces uno ve el amor que le han transmitido los papás o los tíos y se cree que eso debe ser así. Pero la verdad es que es hora de cambiar eso y de disfrutar la vida. Y la vida no se puede disfrutar si el novio cree que uno es de él, como en los tiempos de las abuelitas, y tampoco se puede disfrutar si uno cree que tiene que controlar al novio para que no se vaya con otra, qué pereza”, puntualiza la coaching.

Hacer planes con los amigos y amigas sin que el novio o la novia estén incluidos es una buena forma de salir de la rutina, e incluso, de hacer del romance algo divertido.

“Qué chévere hacer otras cosas y no estar pegado el uno con el otro todo el tiempo. ¿De qué habla uno entonces con la otra persona si la ve todo el día?”, puntualiza Díaz.

Consejos para los padres

Diana López

Psicóloga

Mi primera recomendación para los padres es que no traten de separar a los novios por la fuerza. Lo único que harán será desencadenar reacciones de telenovela. Recuerde que en la adolescencia todo se siente más profundo y más intenso.

La segunda recomendación es que no trate de hacerlo los primeros meses de relación. El enamoramiento se toma su tiempo y es apenas lógico que los dos nuevos novios quieran pasar mucho tiempo juntos. Deles su momento.

Tercero: trate de compaginar con el novio o la novia aunque su apariencia no le agrade. Antes de entrar en conflictos con su hijo o hija por eso, es mejor que se dé la oportunidad de ver qué vio él o ella en la otra persona. Una vez que sepa eso, podrá hablar con su hijo o hija de lo que usted siente con respecto a ese noviazgo.

La cuarta y última recomendación es que evite opinar: si la pareja de su hija o hijo es todo menos lo que usted esperaba, evite decirlo. Lo que sí puede hacer es manifestar su preocupación o su temor por cómo pueden terminar las cosas.

Lo importante en un romance

Camila Díaz

Coaching

1 Aprender a dar y recibir: lo importante en un romance es aprender a dar y recibir afecto. No se trata de estar juntos todo el tiempo, eso no es lo más importante, aunque lo parezca.

2 Descubrir los sentimientos: amar y estar enamorado son dos cosas distintas. Yo puedo enamorarme a primera vista por la apariencia de un chico o chica, pero no puedo amar. Descubrir lo que es el amor es lo más bonito de una relación. Cero dramas.

3 Escuchar y apoyar: de hecho esta es una de las habilidades que más necesitarás para relaciones futuras. Aprender a escuchar a tu pareja y apoyarlo o apoyarla en sus proyectos. Recuerda que ese apoyo no significa que estés encima suyo, significa que le das un consejo sincero si es necesario y el ánimo para continuar si tiene dudas.