Todo un país estaba a la expectativa de la lista de los convocados que irían a la fiesta del mundial. La espera llegó a su fin, y para la hinchada tricolor, recibir la noticia de que Falcao no va al Mundial es triste, ya que este jugador se ganó el cariño de los aficionados del fútbol colombiano y extranjero, no solo con sus goles y grandes actuaciones en sus partidos, sino también por su capacidad de liderazgo y carisma tanto al interior de la selección como con el país completo. Sabemos que es un gran jugador, como todos los que conforman el onceno nacional; sin embargo, el delantero Radamel Falcao se destacó por sus cualidades antes mencionadas, convirtiéndose en la estrella del equipo.

Es indudable que el argentino José Pékerman, director técnico de la Selección Colombia, tomó una sabia decisión y no se dejó llevar por el pensamiento de algunos aficionados que creen que los técnicos se pueden sobornar por dinero, por conveniencia o por el “usted me cae bien, lo voy a dejar”.

Él decide pensando en el bien general o en este caso, en el bien del equipo y, por eso, tomó la decisión de no llevar a Radamel Falcao y Amaranto Perea al Mundial, ya que no alcanzaron a recuperarse totalmente de sus lesiones, al igual que a Luis Muriel, cuyo rendimiento en los últimos entrenamientos quizá no satisfizo sus expectativas.

Ahora bien, Pékerman en la más reciente rueda de prensa dijo que “Colombia va a hacer un gran Mundial, porque el equipo está fuerte y ha crecido mucho mentalmente”. Y es cierto, la selección ha crecido de tal manera que puede tomar la decisión de dejar a un delantero de primer nivel, al margen de un campeonato tan importante, aunque eso signifique dejar a la estrella del equipo sin Mundial y a otros dos grandes jugadores. Sin embargo, todos los colombianos esperan que esa decisión amarga dé muy buenos frutos.

Con su madurez futbolística, Falcao García aceptó y comprendió la decisión de José Pékerman, ya que en la rueda de prensa dijo que no quería poner en riesgo sus condiciones físicas, y tampoco quería quitarle la posibilidad de jugar a un compañero, puesto que todos saben, un jugador recién se recupera de una lesión pierde mucha forma física, y le toma bastante tiempo volver a recuperar su nivel de juego.

Es evidente que Colombia es un equipo fuerte, y lo ha demostrado en sus últimos amistosos internacionales, aún con la ausencia del ‘tigre’. Para la hinchada tricolor las esperanzas siguen puestas en estos veintitrés guerreros.