BELKYS P. ESTEBAN

Nuevo año, ¡seguimos en vacaciones! Encuentros con los amigos, comida rica en la calle mientras nos divertimos con ellos. Pero las vacaciones también se acaban y necesitas toda la buena salud para entrar con energía a la universidad o el colegio. Así que un antojito no cae mal, pero tampoco olvides hacer deporte.

Después de una súper hamburguesa, es mejor salir a montar bicicleta que sentarte a ver televisión. Sin embargo, no te tortures pensando que no puedes comer nada. Disfruta con moderación.

Seguramente has escuchado la expresión “comida chatarra”, que es la traducción literal del término en inglés ‘junk food’: un tipo de comida que tiene muchos azucares, grasas, sal, condimentos y conservantes. Y tus papás, porque te quieren, se preocupan de que pases todo el día comiendo solo eso.

Sin embargo, y para que no se enojen tanto, puedes contarles que la evidencia científica afirma que ningún alimento debe ser satanizado y que todos tienen características y beneficios, siempre que se consuman con moderación.

“Lo ideal es que no consumamos solo lo que se llama técnicamente ‘calorías vacías’, que son los alimentos que no aportan ningún valor nutricional, solo energía porque tienen muchos azúcares, sales, grasas, colorantes, saborizantes y conservantes y no tienen fibra, ni vitaminas”, señala Julián Arbeláez, nutricionista.

El experto explicó además que todos los alimentos aportan calorías en mayor o menor proporción y que el sobrepeso se acrecienta como resultado de un desequilibrio entre el consumo y el gasto energético.

Es por eso que el ejercicio y comer con moderación esta comida es importante para ti. Por esta razón, todo consumidor debe ser consciente de lo que compra y consume, con el fin de conocer la información nutricional sobre los alimentos, que no le induzca a confusión y le permita efectuar una elección informada.

Sin embargo, persiste desinformación sobre los alimentos disponibles en el mercado que pueden hacer parte o no del consumo diario y que además en ocasiones pueden también ser tildados de alimentos no saludables o tener leyendas precautorias para advertir a las personas de sus componentes asociados por ejemplo con la enfermedad alérgica en general.

Para los padres

No prohíba, consuma pequeñas porciones.

El estudio realizado por el investigador del Departamento de Psicología de la Universidad de Pennsylvania, Paul Rozin, señala qué tamaños y porciones pequeñas de todo tipo de comidas ayudan a una ingesta moderada de alimentos, con lo que no existe la necesidad de que los chicos y chicas se abstengan de comer lo que más les gusta y de hacerlo en compañía de la familia o amigos.

Por último, el quedarnos quietos, sinónimo de sedentarismo, es la principal causa de la obesidad y no los alimentos, “por eso la importancia de realizar una actividad física diaria acompañada de una alimentación balanceada en cantidad, calidad y adecuada al individuo es otra disciplina que debemos adquirir y ejercitar”, afirma la nutricionista Patricia López.

Inconvenientes y desventajas para la salud del consumo frecuente de comida rápida:

1 Si sufres una lesión, tus huesos serán menos resistentes porque estas comidas aportan poco calcio.

María Patricia López

Nutricionista

¿Qué es lo que es realmente

malo de la comida chatarra?

“La mayoría de los profesionales de la salud rechazamos la satanización de los alimentos, esta expresión, la ‘comida chatarra’ es una expresión muy a la ligera. Ningún alimento que la naturaleza provee, ni los alimentos procesados, son chatarra. Sin embargo, los seres humanos dependiendo del género, del estilo de vida – es diferente un deportista a un sedentario- desde la masticación estamos convirtiendo esos alimentos para que al final cuando llegan al estómago el organismo tome los nutrientes necesarios para tener la energía y nutrientes para hacer las actividades. En esa medida, no existe tampoco un alimento que me provea todo. Por eso se habla de la alimentación balanceada. Una torta o una galleta termina siendo muy buena, pero obviamente con una porción adecuada. Las mamás están muy preocupadas por la sopa y resulta que la sopa a veces tiene alimentos del mismo grupo y no aporta tantos nutrientes. Lo importante es comer balanceado y con mucho colorido”.

¿Qué hacer con esos antojos

inesperados en vacaciones?

“Uno no tiene que decirle no a las cosas, pero es importante planear. Si hoy tengo un compromiso, entonces mi desayuno es bueno, pero moderado, la media mañana suave, el almuerzo justo, de manera que pueda comer una porción de comida en ese compromiso. Y cuando salen cosas fortuitas, entonces equilibro al día siguiente. La mejor dieta es hacer ejercicio. Gastar las colorías”.

¿Qué decirle a los papás?

“Los papás deben asegurarse que los momentos de consumo en sus hogares y en sus casas sea balanceado y que todo aquello que surja por fuera debe ser moderado y no restrictivo, a no ser que el hijo o hija tenga una condición especial. No se puede dar que en mi casa yo sirva de sobremesa gaseosa, pero sí debo ser flexible si estoy en la calle, una comida rápida es una alimento que tiene cabida en ese momento”.