Sin que aún nos hubiésemos estrenado en la vigencia del TLC firmado con Estados Unidos, ya las importaciones lácteas registran la tendencia que le depara al sector tal convenio con el preocupante crecimiento observado en los dos primeros meses de este año.

En ese lapso se importaron ocho mil 547 toneladas de leche en polvo y productos lácteos, mientras que en igual período de 2011 sólo se habían traído del exterior mil 100 toneladas, y durante 2011, 14 mil 723 toneladas. Es decir, en sólo dos meses de este año se importó cerca del 60 por ciento de lo de todo 2011.

En términos de dólares, lo adquirido entre enero y febrero de 2012, 31.9 millones de dólares, equivale al 91 por ciento de las compras efectuadas en 2011, las que sumaron un total de 44.4 millones.

El esfuerzo exportador registra, por su parte, un comportamiento contrario. Mientras que en 2011 se exportó 5.5 millones de dólares, un año antes se habían exportado productos lácteos por 11.4 millones de dólares y, cuatro años antes, en 2008, cuando se tuvo un auge, 71.9 millones. En otros términos, en 2011 se exportó menos del ocho por ciento de lo logrado en 2008.
    
Lo uno lleva a lo otro
Esas dos tendencias que se observan desde mediados de 2010 -importaciones creciendo y exportaciones bajando-, se correlacionan con el comportamiento de los precios pagados a los productores en el mercado interno.

En efecto, al iniciar el segundo semestre de 2010 el precio promedio nacional era de 803 pesos por litro, elevándose a 993 en diciembre de 2011, mostrando un incremento en año y medio de 16.2 por ciento, aumento que fue mayor en la denominada Región 1 (23.9 por ciento y donde se incluyen las cuencas lecheras del país), que en la Región 2 (15.5, resto del país).

Lo anterior confirma que el precio internacional de la leche, tarde que temprano, se internará. De acuerdo con las cifras que se presentaron en el Primer Foro Internacional de la Leche, efectuado por Fedegán el 3 y 4 de mayo, el precio pagado al productor está entre 40 y 45 centavos de dólar, es decir, alrededor de unos $830/Lt, con costos que oscilan entre 25 y 30 centavos de dólar ($530/Lt).

Los costos
Los estudios de la Oficina de Investigaciones de Fedegán señalan que el costo de producción se mueve alrededor de un promedio de $700/Lt en lechería especializada y de 620, en doble propósito. En fincas sobresalientes de doble propósito el costo se ubica por encima de 500 pesos por litro. (“Modelos Sostenibles en producción bovina - lechería especializada y doble propósito”. Fedegán - Oficina de Investigaciones Económicas - Sena, 2011).

También hay que destacar que estos promedios esconden una realidad económica compleja, en la medida en que el precio pagado a pequeños ganaderos en muchas partes del territorio nacional está por debajo de 500 pesos por litro.

La contrastación de estas cifras muestra -además del complejo tema social originado en el bajo precio pagado a los pequeños productores-, dos aspectos que incidirán en el futuro de la ganadería de leche colombiana: Uno, que el precio interno pagado al productor está por encima de los referentes internacionales en un 20 por ciento; y dos, que los costos de producción están por encima de los referentes internacionales en alrededor de 32 por ciento para lechería especializada; en 17 por ciento para doble propósito; y equiparables en doble propósito en fincas sobresalientes.
    
La baja productividad
Si bien estos porcentajes se reducirían en la medida en que se incluya costos de internación de productos (costos de importación), las brechas siguen siendo grandes.

Brechas que tienen origen en la baja productividad. En lechería especializada, la producción por vaca/días oscila entre 14 y 20 litros, y alcanza, según el estudio señalado, a 26 lts en promedio en establecimientos ganaderos de lechería especializada sobresalientes. En doble propósito se producen, en promedio, entre 2.5 y 3.5 lts; se alcanza a un promedio de 6.8 lts en establecimientos sobresalientes. Estos son niveles que contrastan con los referentes internacionales que dan cuenta de producciones promedio superiores a 30 lts/vaca/día.

Sin bien la productividad de nuestra lechería especializada en establecimientos sobresalientes está cerca (o menos lejos) de este referente internacional, la distancia en costos de producción es grande.

La gradualidad en la apertura del mercado lácteo, que quedó en los TLC, da un pequeño margen de tiempo en el que los ganaderos tienen que aplicarse a llevar costos de producción y saber en qué puntos de su estructura de costos es más débil y en cuál es más fuerte.

En estudios de casos llevados a cabo por Fedegán se ha observado que productores de leche con márgenes superiores a los 200 pesos por litro pueden afrontar una disminución del precio recibido por sus productos, si son capaces de recomponer la estructura de costos en el rubro de alimentación, con el uso adecuado del suelo y la generación de mayor forraje por unidad de superficie, acompañado de un manejo estratégico de rotaciones que disminuya las pérdidas por pisoteo y premie el consumo requerido por los bovinos. Desde luego, con un manejo empresarial que parte de la planeación de la finca, presupuestos reales y seguimiento de los mismos.

Estos documentos, vitales para los ganaderos en las actuales circunstancias, están disponibles en la página web de Fedegán, también en la revista del gremio Carta Ganadera, en su edición física, o en la virtual que figura igualmente en www.fedegan.org.co, y en la Oficina de Investigaciones Económicas de Fedegán.