ALGO PERSONAL

Mientras caminaba por las calles, noté a uno delos tantos indigentes que se refugian en la ciudad.

Su aspecto era tan triste, que me dirigíhacia él, le tomé la mano y se la estreché, preguntándole:¿Puedo hacer algo por usted?El hombre levantó la mirada y exclamó:- “No tiene que hacer nada, ya lo hizo saludándome.

Ahora me sientobien.

Hacía mucho tiempo que no sentía el calor de una manofraterna!”.El rostro de este hombre se vio bien, pese a su aspecto desaliñado.Su cara pareció iluminarse y cambiar de aspecto.Por eso digo que esas pequeñas cosas, hechas con gran amor,pueden llevar paz y alegría al más desvalido.ALGO

DOS NOCHES DISTINTAS

Dos hombres estaban contando la noche que pasaron.

El primerode ellos expresó así su experiencia:“Antes de acostarme me acordé de mis problemas y me llené lacabeza de preocupaciones, lo cual me hizo dar vueltas y vueltas enla cama”.

El otro comentó:“Yo me senté y leí unas líneas de las Sagradas Escrituras. No leímás de un versículo y ¿sabe una cosa? Me llené de bellos pensamientosy dormí de una manera plácida”.

Fueron dos noches bien distintas: El uno se alimentó con ideasmiedosas y deprimentes; mientras que el otro se nutrió con lospensamientos de la confi anza.

PARA TENER EN CUENTA

* No se preocupe si alguien le pega por la espalda; eso quiere decirque usted va más adelante.

* Ame lo que hace: ¡Quiera a su trabajo y disfrútelo! Sin ese ofi cio quepuede desempeñar, no podría enfrentarse a la vida y no resolveríacada día los pequeños y los grandes problemas que le plantea su existencia.

* Simpre hay un lado bueno en cada situación. La clave es encontrarlo.Si usted sabe para qué ocurren las cosas, comprende lo que leestá ocurriendo.* Hay cosas en la vida que parecen “cebollas”: a veces le pican y hastaresultan difíciles de digerir, pero siempre le proporcionan grandesbenefi cios a la salud física y mental.

* Échele cabeza y valore esas situaciones que, a pesar de parecerfeas en su vida, al fi nal le hacen bien.* Use el ‘sacacorchos’. Ese instrumento, que sirve para sacar los taponesde las botellas, es muy práctico en la vida diaria. A veces le convieneen el mundo espiritual utilizar un sacacorchos, para extraer desu cabeza todas esas bobadas que no lo dejan mirar hacia el frente.

* No sea mentiroso, no presuma de ser un hombre entregado a Diossi es un avaro e injusto, o se la pasa maltratando a su hermano. Noaproveche el poder para agredir al indefenso en la cárcel, en la ofi cinapública, en la tienda de comercio, etc... No siga haciendo teatro, eso lohace ver muy feo.

* La oración es poderosa, la lengua es traicionera, la ingratitud hiere,la humildad nos eleva, la hipocresía nos rebaja y lo que más nos cuestaes el dominio de nosotros mismos.

* Utilice ‘curitas’ para el alma; ellas son antisépticas y muy útiles ala hora de cubrir las llagas. Necesita de esa clase de protección paraempezar los tratamientos curativos de su espíritu.

EUCLIDES ARDILA RUEDA

Vivimos pendientes de la ‘pinta’ quevamos a lucir.

Combinamos los colores delas camisas, seleccionamos los accesorios,seguimoslastendencias,enfi n…Siemprehacemos todo lo posible para vernos de lamejor manera posible.

¡Eso está bien!Lo que sí se podría debatir es el hecho deque, no nos detenemos a pensar que lo másimportante es que nuestros vestidos seaninmaculados y, sobre todo, que no tenganarrugas.

Y aunque esta no es una página de modas,los sastres sostienen que los ‘acabados’son más importantes que los mismos diseños.Por ejemplo: la huella que queda en untraje cuando una aguja enhebrada lo cose, tiene que ser recta y debe tener un estiloacorde con el trazado.

También es cierto que, por más que intentamosy más allá de las medidas que tengamos, las ‘pintas’ no nos quedan tan biencomo quisiéramos. En algunos casos, esasensación de estar mal vestidos es casi quepermanente.

¿A qué viene todo este asunto?A que la ‘costura’ de nuestra vida tam-bién debería ser así: impoluta. Y, además, debe ser bella y agradable ante los demás yante nosotros mismos.

Usted no puede vivir pensando que lavida lo hace ver ‘mal trajeado’.¡Ni más faltaba!De igual forma, hay que tener en cuentaque de nada sirve el traje bonito, si la esenciaestá “desvencijada”.

Usted puede ser vanidoso, pero recuerde que siempre valdrá mucho más que un traje.El tema tampoco es para desesperarsepor la forma cómo vestimos.

De por sí yatenemossufi cientesproblemascomopara armarnos un lío con el tema de la vanidad.¡No enredemos la pita!Dejemos la bobada y mejor dediquémonosa cortar esas cosas que no nos dejan ser feliz y que, en cambio, nos hacen ver mal.

Recordemos a esa tenacilla, esa especiede alicate o pinza que usamos para arreglarnoslas uñas y que tienen un encanto especial.

Ese instrumento, además de cortar loque nos sobra, nos hace sentirnos limpios ypulcros.

Alejemos de nuestro cuerpo y de nuestramente todas esas ‘pendejadas’ que están demás.El mensaje de esta página solo quiere querecordemos la estética del alma. Además, que tengamos presente que así los hábitosno nos conviertan en monjes, sí es precisosentirnos bien.

¡LO PEOR DELAS DIETAS!

Lo peor de algunasdietas es que nos atanal espejo y nos privan dela mejor de todas lasopciones que tenemos:¡la de vivir la vida!Los que se meten enestas reglas alimenticiasdeben tener presenteque lo primordialen cualquier dieta es elequilibrio, más que la rigurosidadde no pasarsede kilos.

EJERCICIO

Haga en su mente unretrato de usted mismo.La idea no es que sevea como en un espejo,sino que se imagine talcomo usted quiere seren realidad.¿Ya lo hizo?Ahora mantenga eseretrato en su cabezay jamás permita quedesaparezca.

Siempre que traigaa su mente ese registro,notará cosasasombrosas.Una de ellas, tal vezla más importante,será que cada díaque pase irálogrando moldearsea esa imagen detriunfador que existedentro de usted.