La robótica humanoide avanza a pasos de gigante

La robótica humanoide, dotada de aspecto antropomórfico y funcionalidades humanas, está dando pasos de gigante a la hora de convivir con el hombre en tareas tan cotidianas como la asistencia a ancianos, el entrenamiento terapéutico, el suministro de fármacos a enfermos o la vigilancia de niños en casa.

Más de 400 expertos participaron recientemente en un congreso sobre robótica humanoide, llamado “Humanoids”, considerado el más importante del mundo en este campo, organizado por la Universidad Carlos III.

Humanoides muy desarrollados

Bajo el tema “Los humanos y los robots cara a cara”, con el objetivo de demostrar las destrezas de esta tecnología en entornos cotidianos, participaron personalidades como el japonés Masayuki Inaba, de Japón; Alin Albu-Schäffer, de Alemania (DLR) o Jerry Pratt, de Pensacola, Estados Unidos.

Allí se vieron robots humanoides con grandes destrezas para el reconocimiento humano con sensores muy avanzados para interactuar con el entorno y sistemas de navegación de última generación para sortear de forma autónoma obstáculos y reconocer a las personas sin hacerles daño al pasar junto a ellas.

Se expusieron además brazos y manos robóticas de gran precisión, robots que pueden ser camareros, azafatas o asistentes sociales, con capacidad para llevar paquetes de un lado a otro y autónomos en sus movimientos.

Falta interacción

Según explicó a Efe Dolores Blanco, directora del Departamento de Ingeniería de Sistemas y Automática de la Universidad Carlos III, la robótica humanoide está avanzado a pasos enormes y es previsible que su presencia se generalice en los hogares en los próximos años.

No obstante, se debe perfeccionar su capacidad de interacción con los hombres, porque “no es fácil” aún dotarlos de habilidades como andar, subir escaleras, o sentarse, de modo que se conviertan en herramientas realmente útiles para el hombre en entornos cotidianos.

Uno de los robots humanoides estrella en el congreso fue NAO, que además de venderse como juguete por su versatilidad de movimientos y pequeño tamaño, a un precio de entre 5.000 y 6.000 euros (6.200 y 7.500 dólares), según responsables de Juguetrónica, se comercializa también como plataforma educativa, por su capacidad para dar clases o manejar pizarras interactivas.

Además, NAO cuida a enfermos y colabora en tratamientos terapéuticos, por ejemplo con niños con problemas de movilidad o autistas, a los que transmite mensajes de ánimo o les corrige cuando no entrenan correctamente.

Otro robot humanoide muy avanzado es REEM-C, cuyas capacidades son comparables a las de Asiro, pero con mucha mayor autonomía dado que su batería dura hasta seis horas y que habla varios idiomas.

Credito
RESUMEN AGENCIAS

Comentarios