El Estado dedicará una partida de 600 millones de euros y los constructores alemanes el mismo monto, según dio a conocer el ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, en Berlín.

Respaldo oficial

Cada compra de un vehículo 100% eléctrico será subvencionada con hasta cuatro mil euros (dos mil de dinero público y dos mil del fabricante). La prima será tan solo de tres mil euros para los híbridos recargables, siguiendo la misma pauta de 50/50.

La subvención se adjudicará por orden de petición hasta que se agote la partida del Ministerio, precisó Schäuble.

Berlín profesa desde hace tiempo su apoyo al sector de coches eléctricos y tiene como objetivo que un millón de vehículos eléctricos circule por las carreteras alemanas en 2020, pero hasta ahora había rechazado financiar directamente la compra de vehículos.

A finales de 2015, al menos 50 mil vehículos eléctricos estaban matriculados en el país, de un total de 45 millones, es decir poco más del 0,1% del parque total. Las nuevas inmatriculaciones representaron el ultimo año un 0,7%, cifras que hacen que el objetivo de un millón de vehículos en cuatro años parezca ilusorio.

Menor precio

Con las medidas anunciadas el miércoles, “daremos un verdadero impulso, que hará avanzar la tecnología y también bajar los precios”, declaró el ministro de Economía, Sigmar Gabriel, quien espera que Alemania supere la barrera de 500 mil vehículos eléctricos rápidamente.

El debate relacionado con una ayuda para la compra, un método que ha dado sus frutos en varios países europeos incluyendo Noruega y Holanda, se ha alargado varios años, pero Schäuble se oponía a este mecanismo con el fin de ahorrar dinero.

Aunque el año pasado no se trató demasiado, el tema volvió a la actualidad política a partir del estallido del escándalo Volkswagen, con un aumento de los llamados a apoyar una movilidad aparentemente más limpia.

Más apoyo económico

Los constructores alemanes dieron el salto a la industria eléctrica un poco tarde, sin embargo ahora hay unos 30 modelos en el mercado, automóviles híbridos incluidos.

Los fabricantes llevaban meses pidiendo al Gobierno que aprobara una subvención a la compra, el único medio, según ellos, de dar el impulso necesario a su mercado doméstico.

Los constructores extranjeros también podrán verse beneficiados de la medida del Gobierno si aceptan correr a cargo de la mitad de la ayuda.

Además, el Gobierno también prometió 300 millones en inversiones de aquí a 2020 en estaciones de recarga y 100 millones de euros para la compra de vehículos eléctricos para el parque de automóviles público. En total, estimular el sector costará mil millones de euros a las arcas públicas.