El presidente Santos se sometió a una cirugía de párpados

COLPRENSA - EL NUEVO DÍA
Por asuntos estéticos o funcionales la blefaroplastia mejora la expresión y las condiciones visuales del paciente, en este caso, el presidente Juan Manuel Santos.

Hay que ser prudentes y no abusar de este recurso por mera vanidad. La blefaroplastia, una intervención en la que se retira el exceso de piel de los párpados debe hacerse, según los expertos, cuando aparecen los síntomas: sensación de cansancio, trasnocho y pesadez visual. Esta última condición puede ser tan severa que obstaculiza la visión e impide realizar acciones cotidianas como leer. 

Y es que además de refrescar el aspecto, tal como se percibe en el presidente - luego de someterse a una intervención de este tipo el pasado diciembre-, la blefaroplastia puede hacerse tanto en párpados superiores como inferiores. 

Las alternativas 

Para eliminar las bolsas inferiores, Felipe Martínez, cirujano plástico, recomienda hacerlo a través de una blefaroplastia transconjuntival. "Este procedimiento se hace por medio de un láser dentro del párpado y tiene la ventaja de tener un resultado más natural porque no se modifica la apariencia del ojo". 

Existe otra forma, la más común, de intervenir los párpados en la que sí se obtiene una modificación en la forma del ojo sin embargo, hoy los especialistas trabajan por dejarlo de aspecto más natural posible y eliminar todos esos estigmas quirúrgicos. 

"Lo importante es no estirar más de la cuenta para que la persona quede con un aspecto natural y saber que esta cirugía, cuando es por una alteración funcional, se practica por lo general en personas por encima de los 55 años", indica Álvaro Echeverri Bustamante, oftalmólogo. Juan Manuel Santos tiene 62. 

Respecto a la edad -para esta cirugía- existe una excepción, porque la pérdida de flexibilidad en los párpados se puede presentar en cualquier etapa de la vida, incluso a edades precoces. "Hay gente que por genética tiene esa flacidez y a edades tempranas se le ven las bolsas, lo importante es un examen médico responsable para determinar cuándo se necesita", señala Martínez. 

De ocho a diez años duran los efectos de la cirugía, sin embargo, puede ser necesario repetirla una vez superado ese tiempo, pero no porque aparezcan las bolsas sino por la caída natural de la piel. 

Credito
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