Desde el Centro Democrático, partido que lidera el expresidente Álvaro Uribe, las aseveraciones en contra de el jefe del bloque oriental de la guerrilla y sobre el proceso continuaron. 

La senadora Nohora Tovar, afirmó que al ser ella una víctima directa de alias Romaña, le costaba mucho entender las razones por las cuales este guerrillero se encontabra participando de los diálogos. 

“Es indignante ver, que lleven a este narcoterrorista a La Habana, como si nada hubiera pasado. Una persona que ha cometido delitos de lesa humanidad, secuestro, extorsión, reclutamiento de menores y quien desde Cuba seguramente seguirá dando órdenes para que continúen con atentados y extorsiones” afirmó la senadora. 

Esta congresista e sostiene que estuvo secuestrada durante 4 meses y el responsable fue este jefe de las Farc. 

Por otro lado la líder del Partido Conservador, Marta Lucía Ramírez, cuestionó la presencia del nuevo grupo de negociadores de la guerrilla en Cuba afirmando que hay que poner límites y no dar estos espacios a quienes no han respetado la vida de los ciudadanos colombianos. 

“En Colombia, tenemos que ponerle límites a esta negociación, límites y condiciones, no es cierto que hoy por hoy cualquiera de los miembros de las Farc deba estar sentado cara a cara con nuestros militares y policías, nuestros militares y policías representan la legitimidad institucional del Estado colombiano, es una afrenta contra ellos y contra la sociedad colombiana, sentarlos de igual a igual con 'Timochenko', o con alias 'El Paisa' o 'Romaña'”, dijo Ramírez. 


Sin embargo, desde otras orillas políticas como la Unidad Nacional, el Polo Democrático y la Alianza Verde, la presencia de uno de los guerrilleros más poderosos da cuenta de un proceso avanzado que está atravesando la recta final.