Por su parte, México y Ecuador fueron los únicos países de la región que lograron disminuir su gasto público en este periodo con -2,32 pp. y -2,90 pp., respectivamente.

En comparación con las economías avanzadas, la región va en contravía a sus dinámicas de gasto público. Mientras estas disminuyeron su gasto en -2,20 pp. entre 2012 y 2017, 80% de los países latinoamericanos medidos por la organización financiera aumentó su gasto en el mismo período.

“En el país, el gasto público en general está muy por debajo de los estándares internacionales al ser muy reducido”, analiza César Ferrari, profesor del departamento de Economía de la Pontificia Universidad Javeriana.

El economista explica que este “aumenta poco porque así mismo lo hace la recaudación impositiva, que es muy baja”, y agrega que esto genera “déficit en la inversión en infraestructura. Hay déficit de inversión en carreteras, puertos y aeropuertos. Ecuador, por ejemplo, tiene un sistema envidiable de vías”.

A futuro

En perspectiva, la disminución del gasto público en economías avanzadas a 2023 sería menor a la de Latinoamérica. Mientras éstas restarían -0,25 pps al gasto, comparado con 2018, las economías latinoamericanas presentan cifras mayores como en el caso de Ecuador, que disminuiría su gasto en -5,82 pp, en tanto Colombia lo haría en -1,44 pp.

En 2018, según la proyección del Fondo Monetario Internacional, los países de la Alianza del Pacífico, serán los que menor porcentaje de su PIB dirijan al gasto público en la región. Colombia será el cuarto con 28,41%, por detrás de Perú (21,53%), México (24,61%) y Chile (24,72%). Los países que más gastarán son nuevamente Venezuela con 43,37% y Argentina que invertirá 39,5% de su PIB.