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Son miles las historias de abuso sexual en menores que se ven a diario en el mundo, muchas de las cuales nunca son descubiertas. La manipulación de adultos a menores logra ocultar las violaciones hasta que los pequeños crecen y consiguen denunciar.
Mica Kuuderem es el ejemplo de un caso de estos, siendo víctima de abuso sexual desde que era una niña, un infierno que vivió por 12 años y que tuvo la valentía de contarle al mundo para prevenir a los padres de familia y que conozcan las señales que pueden mostrar los pequeños que atraviesan este flagelo, pero que no pueden expresar con palabras.
La joven, de Argentina, mostró las fotos de su infancia en las que se ve su claro lenguaje corporal alrededor de su papá y los dibujos que pintaba pidiendo ayuda, pero que nadie supo entender en su momento.
“"Mi papá me violó durante 12 años, empezando cuando tenía tan solo 4 años de edad, y dirán, "¿es que la mamá no la bañaba que no se daba cuenta?" fueron muchas las veces que fui a la pediatra por molestias, alergias y dolores en la zona íntima, pero teniendo en cuenta que solo era una niña lo único que pensaban es que no me higienizaba bien”, relató la joven.
En las fotos con su papá se le ve tensa, retraída, con sus manos apretadas o cruzadas y carita sin sonreír. “Mi mamá me protegía del abuso sexual cometido por extraños, me enseñó que ningún desconocido debía de tocar mi cuerpo, pero nunca mencionó la palabra ‘nadie’”, señala como advertencia para la educación de los más pequeños.
Conozca el testimonio completo y las fotografías.
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