La Administración municipal expidió mediante decreto restricciones que deberán ser aplicadas durante el periodo de fiestas folclóricas en Ibagué, algunas no aceptadas y/o comprendidas por el ciudadano del común, pero que al ser acatadas y cumplidas a cabalidad, se podrán obtener resultados fructíferos en materia de protección a la comunidad.

Hay que entender el por qué de las restricciones, por ejemplo, la medida de evitar el parrillero menor de 14 años, permite generar un control particularmente sobre aquellas personas que aprovechan este periodo para cometer ilícitos relacionados con el hurto usando motocicletas, máxime cuando se acerca una quincena con pago de prima, donde el movimiento financiero presenta un relativo aumento; asimismo, minimiza el riesgo de accidentes de tránsito por parte de conductores que abusan del consumo de bebidas embriagantes para pilotear sus velocípedos generando un riesgo a su integridad física y la de otros ciudadanos. 

En materia de prevención nunca se tendrá una conciencia objetiva de lo que se pudo impedir, de cuantos lesionados o muertos se evitaron, esto solo se podría intuir parcialmente cuando se muestran cifras de reducción comparativas con años anteriores.

Limitar la venta de bebidas y comestibles en vehículos automotores, está orientada al control del expendio de aquellos productos que han ingresado a la ciudad de contrabando, así como aquellas que estarían en estado de adulteración, licor que atenta contra la salubridad del consumidor, recomendando adquirir estos en sitios seguros y autorizados. 

La prohibición en la comercialización, uso y tenencia de harina, espuma, está dirigido a evitar riñas y/o agresiones por intolerancia que pueden finalizar con vulneración a la integridad de las personas; máxime cuando se está consumiendo bebidas embriagantes, de las cuales no se debería abusar, evitando escenarios de confrontación con amigos, allegados e incluso la misma familia, y es ahí, donde se requiere el apoyo responsable de alguna persona que en un momento de crisis pueda mediar objetivamente y avisar oportunamente a las autoridades, pensando siempre en prevención de tragedias que empañen la festividades.

No todas las restricciones están decretadas, pues existen algunas innatas, de autocontrol, conocimiento y aplicación del ciudadano, medidas preventivas que permitan pasar un momento de esparcimiento de forma sana y segura; actividades sencillas y básicas, como no abandonar los vehículos en zonas prohibidas o sin seguridad, no dejar a la vista elementos de valor que motiven a los delincuentes atentar contra su propiedad, se recomienda por estos días usar transporte público para dirigirse a los eventos.

Igualmente, evitar dejar las viviendas solas o sin los sistemas de seguridad correspondientes, para mayor tranquilidad no usar elementos llamativos y de valor (joyas, celulares) en los puntos de gran afluencia de personas, zonas aprovechadas por delincuentes dedicados al hurto en la modalidad de cosquilleo.

Por ello, la Policía Metropolitana de Ibagué, a través de la estrategia “cuadrante seguro, vacaciones seguras”, afianzará las actividades preventivas y de control, tendiente a minimizar el accionar delincuencial, para lo cual es contundente consolidar un frente común que diezme las pretensiones ilícitas, que permitan blindar la ciudad de los criminales, invitando a autoridades, medios de comunicación, taxistas, empresas de vigilancia, sector comercial y todo ciudadano de bien que nos alerte sobre factores que puedan afectar la tranquilidad y seguridad de la temporada folclórica. 

Felices fiestas Dios y Patria.