Frente a la seguridad, no se puede dar aplicabilidad al adagio popular “Todo para última hora”, máxime que desde el primer día de 2017 se planificaron las estrategias a seguir para enfrentar los fenómenos que afectan la sana convivencia, una hoja de ruta que se aplicó estrictamente para alcanzar resultados exitosos; en ese sentido, sí hay que tener muy claro que se debe reforzar el paso en el último bimestre del año en curso para culminar las tareas y pretensiones previstas en materia de seguridad. Es así como la Policía viene desarrollando el Análisis Integral Seguridad Ciudadana - Aisec 2018, en que se han inventariado los delitos y riesgos sociales que más aquejan a la comunidad, generando cursos de acción diferencial que contrarresten el accionar de las bandas delincuenciales con asentamiento en esta jurisdicción; no obstante, se requiere del ingrediente fundamental en este tipo de escenarios, como lo es la sinergia institucional, complementada con el trabajo mancomunado de líderes comunitarios y obviamente del aporte de cada habitante de la región, avocando, como es debido, el sentido de corresponsabilidad, máxime que la seguridad es un compromiso de todos y de cada uno de los habitantes de este país.
Esto conlleva a proyectar los escenarios de atención que se avizoran particularmente al finalizar el año, cuando algunos comportamientos contrarios a la convivencia y delitos tienden a registrar un aumento, entre éstos, las lesiones personales como resultados del desmedido consumo de bebidas embriagantes, aunado a la actitud intolerante de algunas personas. Por otra parte, el hurto en la modalidad de cosquilleo ante la máxima concentración de compradores y el hurto a residencias como resultado de la ausencia de moradores en las viviendas, este tipo de eventos se pueden evitar si desde ya se programan medidas de protección, máxime que de forma jocosa pero con un mensaje muy serio, se estaría evidenciando la actividad delincuencial donde éstos señalan “…a partir de la fecha, trabajamos las 24 horas del día…”, para tranquilidad de la comunidad la Policía de los colombianos, estará 24 - 7, “ojos abiertos y oídos despiertos” 24 horas del día, los siete días de la semana, se reforzará las medidas preventivas y de control para atender oportunamente el llamado del ciudadano. Frente al particular, hay dos herramientas con las que cuenta el ciudadano para contribuir a las actividades operativas de la institución, como lo es la denuncia, que permita actuar ágilmente, pero se requiere de datos concretos que generan articulación de las especialidades y modalidades de la policía; así mismo, el uso del 123, y para ello es necesario que este sistema sea utilizado con responsabilidad y para lo que fue creado como es informar actos y/o hechos que atenten contra la sana convivencia.
Sorprendente que aún se detecta el inadecuado uso de la línea 123 y en la que se reciben llamadas de niños o personas “molestando”, por lo cual se estima necesario recordar a la comunidad que se podrá dar aplicabilidad al Código Nacional de Policía y Convivencia en su artículo 35 numeral 7, de Utilizar inadecuadamente el sistema de número único de seguridad y emergencia; así como el artículo 38 numeral 4, de Emplear o inducir a los niños, niñas y adolescentes a utilizar indebidamente las telecomunicaciones o sistemas de emergencia. Finalmente, invitamos a la comunidad a que se programe para efectuar sus compras decembrinas oportunamente, evitando estar a la moda con el coloquial “Como buen colombiano, todo para lo último”, pues el propósito es que disfruten de la actividad comercial, generando un sano esparcimiento por la ciudad y no convertir un día de compras en un momento de estrés navideño. Por su seguridad y la de todos, actúen con responsabilidad.
DIOS Y PATRIA
Comandante Policía Metropolitana de Ibagué
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