Campo para la juventud

Héctor Manuel Galeano Arbeláez

Arrancaron los discursos promeseros de los aspirantes a votos de los que sufragan, sin saber por quién botan sus votos. La rebuznada en nada se diferencia de los relinchos de otros tiempos y con los mismos autores: palabrería barata que solo demuestra ignorancia sobre los problemas del país y desprecio por sus electores.

Nada proponen sobre educación cultura, investigación, ciencia, salud, tierras, seguridad alimentaria, justicia, empleo, historia y ética, por ejemplo. La disculpa está a la vista: desaparecieron los partidos tradicionales y los líderes humanistas. Quedamos en manos de las mafias desde hace rato, como nos lo recuerdan con el “8.000 de la justicia”, para no olvidad el 8.000 de Samper y Serpa, monumento a la criminalidad y a la impunidad, que se puede dar picos con las fiscalías de Luis Camilo Osorio, de Saludcoop Montealegre y de Martínez con su combo criminal del “entetado”, Moreno, Malo y otros más malos. Y ahora a esperar que se desenrede la madeja.

Entretanto no vendría mal una mirada a dos hechos importantes; la visita de Papacho en la cual Colombia le mostró al mundo, lo mejor de su cultura, nuestra música, las danzas y donde el Papa dejó su mensaje de paz y les recordó a todos los colombianos, especialmente a quienes detentan poder político, económico y religioso, incluyendo los purpurados, que el diablo entra por el bolsillo, que la vida es sagrada.

El otro hecho que conmovió al mundo entero ocurrió en México, a propósito del reciente terremoto, donde sus jóvenes fueron los primeros que se organizaron para brindar auxilio. Un ejemplo de solidaridad, que sus compatriotas han tomado como un paso claro para iniciar la renovación de su clase política, que está bastante desprestigiada.

La mirada sobre esos acontecimientos bien podría servirnos para pensar en los muchos problemas y necesidades de nuestro país, que reclaman soluciones y no maniobras para proteger la impunidad de los señores de cuello blanco y sostenerlos en el poder, contribuyendo así, a que cada vez sea más difícil que Colombia viva conciliada y en paz.

Es hora de pensar en nuevos líderes jóvenes, que le apuesten a la conservación del planeta, a la productividad limpia del campo, que se enamoren de su tierra, que defiendan sus recursos, que construyan una sociedad más justa y solidaria, que no se roben los recursos púbicos y sobre todo que respetan a vida.

*.- Ñapa1: Despierta Purificación. Tu futuro está en Innovar.

*.- Ñapa2: Esto dijo Serpa sentado en su curul: “El liberalismo goza de buena salud” “y los colombianos de amnesia 8.000”, ripostó satuple.

*.- Ñapa3: Homenaje a la Coral Ciudad Musical, Patrimonio Cultural del Tolima, con motivo de sus cincuenta años, ofrecido por músicos tolimenses en la sede de la Coral, carrera 4 No 11-37 de Ibagué. Octubre 5, 6, 7, 12, 13 y 14.

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