El Tolima no aparece en algo que se pueda destacar como relevante, salvo algunas citas, que llaman tenuemente la atención por sus características parroquiales. 

Ibagué, por ejemplo, clasificó en el octavo lugar entre las 10 ciudades más pobladas de Colombia -debajo de Soledad y encima de Bucaramanga-, con 542 mil 876 habitantes a partir de datos actualizados del Dane -de junio de 2013- y donde Bogotá, como siempre, lleva la delantera, con siete millones 674 mil 366 habitantes, seguido un poco lejos por Medellín, con dos millones 417 mil 325 habitantes.

Otro dato curioso para el Tolima y relacionado con la temperatura anual promedio más ardiente en la geografía nacional, ubica a la población de El Salto en Ambalema en el quinto lugar, con 28.8 grados centígrados  como la quinta población más ardiente del país, superada tan sólo por lugares del Cesar, Sucre y La Guajira. De algo, quizá en aspectos agrícolas o turísticos debería servir esa condición.

En gastronomía, no se registra nada interesante, salvo la ubicación del tamal tolimense, luego de la bandeja paisa, en el segundo lugar con mayor número de calorías: mil 430. La lechona tolimense no aparece ni en la foto.

Ahora bien, en cuanto a personajes emblemáticos salimos rajados. Se salva Gloria Valencia Castaño, ocupando el primer lugar en los hitos históricos de lucha por el medio ambiente por su programa en TV Naturalia, presentado entre 1974 y 1994.

En deportes nada. En cultura tampoco. En arquitectura y obras patrimoniales menos. Claro que ese registro de Semana en cuanto a memoria histórica no cuenta con la seriedad académica que de pronto, en otra oportunidad, pueda ubicar al Tolima y a sus valiosos personajes en mejores lugares.

Sin embargo, en cuanto a lo musical, sí existe una joyita en esta clasificación de Semana en relación con nuestro terruño. Se refiere a la clasificación que el famoso ibaguereño Jorge Barón hizo de sus 10 canciones favoritas, en las cuales -claro está- el Tolima da sopa y seco frente al conjunto nacional, donde la primera es Hurí, de Garzón y Collazos, y la décima Soy tolimense, del también inolvidable dueto. Lo novedoso lo constituye la canción Puente tolimense, que ocupa el quinto lugar, debajo de Colombia tierra querida, de Lucho Bermúdez, y encima de Angelito, de Manolo Muñoz, y que, de verdad, nadie la conoce en el Tolima. Menos aún, si se ubica con la autoría de Alberto Castilla y Nicanor Velásquez. Por ello, sería por demás oportuno, que con “entusiasmo” Barón aclarara el tema. De seguro, en la edición comentada, cambiaron El bunde por El puente. Y, resulta justo y necesario, es nuestro deber y obligación como tolimenses, darle al puente lo que es del puente y al bunde lo que es del Bunde. Agüita para nuestra música.