¿Cómo actuamos… si se ataca, cuando se es coherente con el proceso de formación a los estudiantes?

María Yolanda Jaramillo G.

Es la situación que enfrenta la profesional Gloria Capera, rectora de la institución educativa Ciudad de Ibagué, en relación con el saludo a dos de los integrantes de las Farc (no portaban armas) que se dirigían a la zona de concentración veredal, en Planadas.

Ella actuó, según la recta razón, y en el momento oportuno, acorde con el Proyecto Institucional ‘Plantón Paz’, lo que demostraría dos cosas: su validez conceptual y su validez fundamentada en la “práctica”, del Proyecto Institucional, con el que se había comprometido la Institución.

Mucho antes de concretarse los Diálogos de Paz en La Habana, la Institución inició, el 9 de septiembre de 2010, el proyecto presentado por el profesor Carlos Alberto Peña Moya (tolimense del área de Ciencias Sociales, graduado en la Universidad Surcolombiana, y con muchos afectos en Huila), acogido con gran entusiasmo por la rectora.

Alrededor del proyecto se empezó la unidad de acción de los directivos, profesores, estudiantes y padres de familia, quienes a una sola voz proclamaban la “necesidad urgente de la Paz”, con una salida negociada y política al Conflicto Armado en Colombia; se exigía a viva voz no más violencia armada, no más víctimas del conflicto. Se trabajó por “una Cultura de Paz, Convivencia y Reconciliación”, durante seis años. Este año serían siete años dedicados a promover acciones de paz y convivencia, a través de temas específicos, por ejemplo: en febrero están programados temas como: Liderazgo - Participación Comunitaria, Ciudadanía y Política, como pensamiento moderno - votar es un compromiso, temática que cada profesor desarrolla, exigiendo ser socializada con la familia. En el año se alcanzan a desarrollar 52 ‘Plantón - Paz’ (uno cada jueves); por consiguiente se han trabajado, a la fecha, 312.

En 2011, el Ministerio de Educación felicitó y premió a la Institución, por la aplicación excelente de las Competencias Ciudadanas a través del proyecto, además la Institución está vinculada a la ‘Mesa por la Paz’, en la que tienen presencia los gobiernos departamental y municipal, y ONG’s.

Con todo este trabajo institucional de formación a los estudiantes, en temas de convivencia, reconciliación, perdón y acatamiento al “Acuerdo de Paz”, me pregunto: ¿cómo no responder positivamente, con una acción demostrable con los estudiantes, con respecto a su formación recibida? ¿Acaso la coherencia entre lo que se dice y hace no es importante…? ¿O pesan más las apariencias, y los protocolos de permiso?

La Rectora en este caso hizo uso de una “Autonomía Institucional Ganada”, en el tema de la Paz.

El acusador, Jaime Romero, investigado por acoso sexual en la Institución, no tiene autoridad moral, muestra su falsa conciencia.

Es gratificante constatar que personas como el abogado Gonzalo Parra manifiestan, en su columna, que la Paz se construye con hechos, no con simples palabras.

Expresidenta Academia de Historia del Tolima

Comentarios