Solo fue una frase, que fácilmente se puede neutralizar, no causa ningún daño real, porque no precisa ninguna acción. En cambio, la historia reciente nos determina, que sí existieron graves errores de manejo gubernamental, al propiciar que se sacara del pénsum de Primaria y Bachillerato la asignatura de “Historia”, al crear el “Área de Ciencias Sociales”, una mezcla de geografía, economía, historia, derechos humanos, paz y democracia, antropología, sociología, pénsum que se pensaba iba a dar respuesta al proceso de globalización, que estaba en su furor.
Fue tan poca la planeación para este reto académico, que la preparación de los docentes fue casi nula, y terminó el área anarquizándose, el profesor podía escoger, según su gusto y preparación las asignaturas, con las cuales validaba el área de ciencias sociales; no existía seguimiento, ni control, ni metodología, ni didáctica que permitiera la funcionalidad del área. La asignatura más afectada fue la “Historia”, reduciendo su intensidad horaria, y a veces suspendida del todo.
Un tiempo después las voces de inconformidad surgieron, se manifestaba la “Crisis de la Historia”, pero nada se hacía al respecto. Los funcionarios del Ministerio de Educación Nacional “MEN” fueron testigos presenciales de esta equivocación, a lo largo de varios gobiernos: Belisario Betancourt, Ernesto Samper, Andrés Pastrana, Álvaro Uribe (dos periodos), y Juan Manuel Santos, quien en su último periodo presidencial, expidió la ley 1874 del 27 de noviembre de 2017 “señala la obligatoriedad de la asignatura de Historia en la formación de los estudiantes”, lo cual, está a la espera de su reglamentación por parte del Ministerio de Educación Nacional “MEN”.
Esta larga época de “Crisis de la Historia” impidió a varias generaciones de jóvenes, tener contacto con la memoria histórica del país, entre ellas, está la generación del Presidente Duque. La indiferencia de los gobiernos para sustentar una educación con calidad, deja huellas que no se pueden indemnizar. Sin temor a equivocarme pienso que el 98% de los empleados públicos y políticos, desconocen nuestra historia, aún en los eventos más importantes de conformación de nuestra nacionalidad colombiana.
El presidente Duque quiere destacar una fecha muy importante en nuestra historia el Bicentenario de la Independencia, en la batalla militar del puente de Boyacá, 7 de Agosto de 1819. Son 200 años de vida republicana. Sería conveniente que esta conmemoración se hiciera en relación con lo sucedido en la “Campaña Libertadora” que permite dimensionar todo el proceso militar que condujo a la Independencia.
Existe otra fecha de similar importancia, el 20 de Julio de 1810, la cual conmemora la Alcaldía de Ibagué desde el 2016 con un movimiento cívico – popular llamado “Marcha Libertaria”, porque ese día según fuentes primarias, se registra el renacer político con la entrada al legítimo poder ciudadano. Ibagué en esta conmemoración ha sido fiel a la historia, debería ser imitada a Nivel Nacional.
Comentarios