LA TIERRA DE NADIE…LA TIERRA DEL OLVIDO… “EL ARBORICIDIO EN CALAMBEO”

María Yolanda Jaramillo G.

Es un estado de alerta para la población de Ibagué y muy especialmente para el Concejo Municipal, que debe exigir a las entidades del gobierno, y entidades privadas, encargadas de la calidad ambiental en la ciudad, el cumplimiento del proyecto SIGAM (Sistema de Gestión Ambiental Municipal), que permite garantizar que las comunidades funcionen de manera sostenible, con las condiciones básicas determinadas por ley. Para ello, se instituyó un nuevo marco Jurídico - Político, para la “Gestión Ambiental en el territorio Colombiano”.
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El primer marco – la constitución política de 1991 (Art. 80) “es obligación del estado de involucrar el componente ambiental en la gestión pública” – el segundo – la ley 99 de 1993, que crea el Ministerio del Medio Ambiente SINA (Sistema Nacional Ambiental) al que se le incorpora unas entidades regionales denominadas “Corporaciones Autónomas Regionales”, que buscan un manejo integral del medio ambiente -  el tercero-  el Sistema de Gestión Ambiental Municipal SIGAM, “visión ambiental municipal” (plan aprobado por acuerdo o resolución del alcalde)  en este plan participan – actores institucionales -  Cortolima, Concejales del área ambiental; Dirección de Riesgos; Grupo de Prevención y Atención de Emergencias; Área Ambiental del departamento; Veedurías, Personería o Contraloría -  Actores Económicos – Gremios Económicos, Empresarios – Actores Sociales -  Academia -  Universidades, Instituciones Educativas; Representantes de la Comunidad - Juntas Administradoras Locales y de Acción Comunal. Según la norma la Gestión Ambiental es totalmente participativa y de interlocución permanente con todos los actores vinculados al proceso; para proteger, conservar, recuperar los recursos naturales, y revertir los efectos del deterioro, y la contaminación sobre el medio natural,  y la calidad de vida de la población.

Según lo informado por el diario Nuevo Día (Enero  18 de 2021), los habitantes del sector de Calambeo (4 de noviembre de 2020) constataron una tala indiscriminada de árboles a unos  50 metros de la avenida 19. Este arboricidio se conoció por la denuncia que hizo la Veeduría Agua para Ibagué (VAPI) hasta el momento desde el 4  de noviembre no se sabe quién es el dueño y si tenía permiso ambiental. Si esto pasa en la ciudad, ¿que no podrá pasar en el sector rural del municipio?... además se agrava la situación,  cuando el director de Gestión de Riesgo y Atención de Desastres, al ser comunicado del arboricidio, señalo que era asunto de Cortolima, se demuestra con esto, que no hay interlocución entre las instituciones, parece que cada entidad es una isla; no es esta la manera como debe funcionar el SIGAM. ¿O será que no existe en Ibagué el Sistema de Gestión Ambiental Municipal?, el Concejo Municipal lo podría confirmar. De todas maneras, parece que a la crisis de pandemia, se le agrega la crisis ambiental. 

MARIA YOLANDA JARAMILLO

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