Los datos sobre desempleo en Ibagué 2013

El año 2013 ha comenzado con datos positivos sobre el mercado del trabajo en la capital tolimense. Que ya estemos cerca de una tasa de desempleo de un dígito y que cada mes nos alejemos más del primer lugar de desempleo y que nos ubiquemos sobre el promedio nacional entre las ciudades donde se realiza la encuesta correspondiente, es positivo para todos.

Ibagué fue en los tres meses anteriores, la ciudad donde hubo mayor disminución del número de desempleados. El Dane calcula que en Ibagué hubo una disminución de 11 mil desempleados menos en el año 2012, con relación al 2011. Lejos está la tasa de desempleo de Ibagué ahora, con relación a la del año 2003 que era del 23.5 por ciento.

El alcalde Luis H. Rodríguez ha propuesto como meta, que la tasa de desempleo en nuestra ciudad esté en el rango de un dígito. Esto parece alcanzable con la contribución de los empresarios privados que son quienes ofrecen nuevos empleos en la actividad comercial y en la construcción de nuevas viviendas, aquellas que vemos en diferentes lugares de la ciudad.

La Alcaldía y las organizaciones estatales por su parte, están en la tarea de invertir en infraestructura vial; unos y otros están generando nuevos empleos.

Entonces, si la meta es que el desempleo sea de un dígito, habrá que poner en marcha estrategias diversas. Es prudente recordar un estudio de Hugo López sobre el problema del desempleo en Ibagué, divulgado en el año 2007, con el título “Por qué el desempleo en Ibagué ha sido tan alto?”.

Los datos de base para el análisis fueron los de hace cerca de 12 años cuando éramos los campeones del desempleo. Pero sus análisis y propuestas sobre este fenómeno, siguen siendo válidos.

Decía López que uno de los problemas del desempleo en Ibagué era el de la baja calidad del empleo debido a la informalidad; que, igualmente, la tasa de participación laboral era y sigue siendo superior a la del promedio nacional, que hay en esta ciudad un exceso de trabajadores con bajo nivel educativo, “un exceso de trabajadores sin educación o con sólo primaria”, déficit de personas con formación secundaria y media y educación superior.

Entonces es viable, como lo he dicho en otras oportunidades, intervenir sobre la oferta educativa para incorporar y propiciar la permanencia de un mayor número de estudiantes en educación secundaria, media y superior, con lo cual se estaría mejorando la calidad de los demandantes de empleo y disminuyendo la tasa de participación, de personas con 12 años o más que necesitan empleo.     

”Elevar la tasa de asistencia escolar en secundaria, evitar la deserción…elevar la pertinencia laboral en la educación media...reducir la tasa de participación laboral de los estudiantes”, fueron las recomendaciones de este experto en materia educativa.

Credito
INDIRA ORFA TATIANA ROJAS OVIEDO

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