El doctorado en Ciencias de la Educación

Indira Orfa Tatiana Rojas Oviedo

El doctorado en Ciencias de la Educación de Rudecolombia - Universidad del Tolima hace parte de una red de 10 universidades que fortalecen y facilitan la movilidad estudiantil, y es uno de los cinco doctorados que ofrece nuestra Universidad.

Es un doctorado que permite acceder a seminarios en las diferentes universidades que hacen parte de la red y que enriquecen y aportan saberes científicos, gracias a los docentes reconocidos por su alta formación académica, que en su mayoría provienen de distintas universidades nacionales e internacionales. Han dejado huella docentes del status intelectual de Guillermo Hoyos, Joaquín Gairín, José María García Garduño, Marieta Quintero, Jorge Oswaldo Sánchez, Jorge Martínez, entre otros.

Lo más valioso de estas cohortes es la interdisciplinariedad. Entre sus estudiantes fácilmente hay abogados, médicos, psiquiatras, enfermeros, licenciados, agrónomos, ingenieros de plásticos, veterinarios, entre otros, que confluyen en el interés por formarse en el campo de la educación y que ejercen la docencia en programas académicos de Instituciones de Educación Superior. Al respecto, el científico y profesor de la UT Gustavo Adolfo Vallejo plantea que “está demostrado históricamente que la ciencia avanza principalmente, cuando los problemas son abordados desde varias disciplinas”.

El reconocimiento que ha ganado Rudecolombia permite que muchos de los estudiantes logren comisiones de estudio o becas incluso de Colciencias, uno de ellos goza de una beca optada mediante convocatoria, con la que logró asignación de mas de 300 millones de pesos que se distribuyen mensualmente para garantizar sus estudios doctorales.

Este doctorado está adscrito a la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad del Tolima, cuyo decano es Andrés Felipe Velásquez y su directora es Liliana Margarita del Basto Sabogal, quien a la vez es la directora nacional de Rudecolombia.

A la fecha, se cuenta con tres cohortes en la UT, de las que ya hay varios graduados, siendo el primero de ellos el médico Gustavo Montealegre Linet. Sin duda, este doctorado seguirá ofreciendo nuevas cohortes, sin que riña con la propuesta de crear uno propio, exclusivo para contribuir al alcance del más alto nivel de formación postgradual de docentes.

La exigencia de Acreditación de Alta Calidad es un desafío que se impone la UT y para ello necesitamos más doctores.

El aporte al conocimiento científico, a través de las tesis doctorales, necesariamente impacta y transforma las realidades observadas. Además, las ofertas de doctorados que se hacen el país, son reducidas, frente a Brasil, que gradúa anualmente cerca de 15 mil doctores. Entonces, la UT tendrá que pensar en fortalecer estos programas.

Formar Doctores en Ciencias Humanas es una necesidad para el país y el mundo.

Lo plantea la filósofa norteamericana Martha Nussbaum refiriéndose a las humanidades: “… Es la capacidad de pensar de manera crítica; la capacidad de trascender las lealtades locales y acercarse a los problemas mundiales como un “ciudadano del mundo”; y “la capacidad de imaginar comprensivamente la situación del otro”.

Comentarios